USHUAIA.- En un hecho que sacude el ámbito judicial de Tierra del Fuego, el despacho y domicilio del juez Andrés Leonelli fueron objeto de allanamiento. La medida fue ordenada por la jueza de instrucción 2, María Cristina Barrionuevo, tras una alerta recibida de organismos internacionales de monitoreo, que habrían detectado imágenes de abuso sexual de menores en una nube asociada al magistrado.
Si bien la denuncia resulta grave, también cabe la posibilidad de que el hecho se remita a una circunstancia profesional propia de la labor del magistrado. Se incautaron todos los dispositivos informáticos de su domicilio y su despacho en la Sala Penal de la Cámara de Apelaciones de Ushuaia, donde Leonelli se desempeña.
Como camarista penal, Leonelli revisa causas de este tenor por lo que recibe información de pedofilia para el análisis jurídico de cada proceso. Incluso, trascendió que el juez habría recibido una advertencia previa de Google por material inapropiado, ante lo cual inició una demanda para certificar la procedencia de esas imágenes, aunque este antecedente aparentemente no fue investigado por la jueza Barrionuevo antes de ordenar el allanamiento.
El allanamiento se realizó bajo el delito previsto en el artículo 128 del Código Penal, que refiere a la tenencia de material de pornografía infantil. La investigación se centra principalmente en un teléfono particular del juez, que sería el dispositivo cuya IP fue observada, y sobre el cual el magistrado no habría brindado la clave hasta el momento.
Por ahora, la jueza Barrionuevo notificó de sus derechos y garantías al juez Leonelli, dejándolo formalmente imputado. Esta situación exige un pronunciamiento oficial por parte del Poder Judicial para esclarecer los hechos y su impacto institucional.