Tierra del Fuego.- El mandatario de Tierra del Fuego, Gustavo Melella, inauguró el 37º período de sesiones ordinarias de la Legislatura provincial, con un discurso en el que aseguró que el “nuevo rumbo económico nacional traerá progreso”.
Melella repasó durante casi dos horas el estado en el que recibió la provincia en diciembre último, y fue crítico con la administración de su antecesora en el cargo, la actual diputada Rosana Bertone, a la vez que enunció los ejes de su futura gestión y sostuvo que “nuestro gobierno va por el bien común”.
En sus múltiples alusiones a la situación nacional, el mandatario fueguino reconoció que el país “atraviesa momentos difíciles”, y mencionó como desafíos inmediatos a la “renegociación de la deuda externa” y a la “reactivación del sector industrial”.
Necesitamos que Argentina salga de la actual situación, que se recupere el consumo y que vuelva el crédito. Confiamos en que el nuevo rumbo económico traerá progreso”
Gustavo Melella
En esa línea, sostuvo que “acompañaremos a nuestro presidente en esta difícil tarea y confiamos en que junto a su equipo de gestión, y compartiendo esfuerzos, los objetivos se van a lograr”.
“Necesitamos que Argentina salga de la actual situación, que se recupere el consumo y que vuelva el crédito. Confiamos en que el nuevo rumbo económico traerá progreso”, insistió el gobernador de la provincia austral.
Al hablar ante la asamblea legislativa compuesta por 15 diputados provinciales, Melella también mencionó a distintos funcionarios del gobierno nacional, como por ejemplo el ministro del Interior, Eduardo 'Wado' de Pedro, a quien le agradeció la continuidad del llamado “Fideicomiso Austral” para respaldar obras de infraestructura en la provincia.
También remarcó las gestiones del ministro de Transporte, Mario Meoni, y del ministro de Turismo y Deportes, Matías Lammens, relacionadas con obras de ampliación en el puerto de la ciudad de Ushuaia y la concreción del llamado “Polo Logístico Antártico”.
Área por área
El gobernador fueguino realizó un repaso pormenorizado de la situación en que encontró el Estado provincial cuando asumió sus funciones el pasado 19 de diciembre, y en esa línea fue crítico con los resultados de la gestión desarrollada por Bertone entre 2015 y 2019.
El titular del Ejecutivo reveló haber recibido una provincia con una deuda de $6700 millones, compuesta por “$2300 millones de bonos colocados en el exterior, otros $2300 millones de obligaciones con otros organismos, $1600 de deudas con proveedores y $450 millones de deudas con los municipios”, a lo que hay que sumarle “un déficit de $700 millones de la Caja Jubilatoria y otro de $1300 millones de la Obra Social estatal”, enumeró.
“Nos encontramos con un Estado desorganizado, con faltante de documentación y más de 500 expedientes sin resolver. Por eso le hemos encargado a la Universidad de Buenos Aires un informe de auditoría cuyo resultado haremos público. No estamos buscando fantasmas ni haciendo caza de brujas, pero debemos rendir cuentas”, aseveró Melella.
El mandatario criticó, además, la existencia de “obras públicas licitadas sin fondos”, el “desmanejo” en el otorgamiento de viviendas sociales y pensiones, y el estado de los edificios públicos y del sistema degeneración eléctrica, a la vez que ponderó la reapertura de paritas con los gremios estatales y anunció créditos no bancarizados para Pymes y la creación de una empresa provincial de hidrocarburos, entre otros proyectos