USHUAIA.- Así lo resolvieron los jueces del Tribunal de Juicio en lo Criminal del Distrito Judicial Sur, tras el pedido de excarcelación de parte de los abogados defensores de 3 de los 4 brasileños, acusados del delito de defraudación mediante el uso de tarjetas de crédito, debito y/o compara falsificada en concurso real y encubrimiento”.
Además, los jueces Alejandro Pagano Zavalía, Maximiliano García Arpón y Rodolfo Bembihy Videla, les impusieron a Armando Ferreira Camors, Edson Leal Moreira y Rodolfo Wilson Cordeiro Machado rigurosas pautas de conducta, bajo apercibimiento de revocar el beneficio.
Los acusados tienen prohibido salir del país, la Provincia y la ciudad sin autorización; deben comunicar al Tribunal todo cambio de domicilio; fijar domicilio en la ciudad de Ushuaia; comparecer dos veces por día a la Comisaría que por asiento de su residencia corresponda, en los horarios comprendidos entre las 9 y las 11 y las 16 y las 18; abstenerse del consumo de estupefacientes y del abuso de bebidas alcohólicas y prohibición de circular entre las 21 y las 6.
En noviembre pasado, la juez del Juzgado de Instrucción Nº 2 del Distrito Judicial Sur, Cristina Barrionuevo procesó con prisión preventiva, a los 4 involucrados (Rodolfo Gilson Cordeiro Machado, Armando Ferreira Camors, Ronaldo Ferreira Dos Santos y Edson Leal Moreira), por los hechos ocurridos los primeros días de octubre en Ushuaia.
El Fiscal Daniel Curtale, en tanto, había rechazado el pedido de la defensa, al considerar que “la situación procesal de los imputados no había variado”, remarcando la “falta de arraigo en la jurisdicción, que en el contexto de la investigación existieron documentales al momento de ingreso al país, entre otros datos”.
Además, se tuvo en cuenta la opinión del Juzgado de Instrucción al momento de dictar la prisión preventiva, y confirmado luego en segunda instancia por la Cámara de Apelaciones, sobre la existencia de riesgos procesales.
El caso
Entre el 5 y 7 de octubre pasado, la banda de brasileros, efectuó diversas compras en comercios locales, realizaron excursiones y pagaron hoteles y restaurantes con tarjetas falsificadas, abonando para ello desde $200 a $14.060, en 29 hechos.
La maniobra fue descubierta tras el aviso del propietario del comercio Villagio de Ushuaia a la policía, luego de que fuera prevenido telefónicamente por una de las víctimas desde Buenos Aires. A raíz de la denuncia se ordenaron distintos allanamientos. Los dos primeros fueron en los hoteles donde se encontraban alojados los ciudadanos brasileros.
En esos allanamientos se secuestraron elementos, en estado nuevo, tales como prendas de vestir, y además unas 35 tarjetas de diferentes entidades, algunas de ellas habían sido descartadas en el baño del local comercial, cuyo propietario dio aviso a la policía de la presencia de estas personas.
Atento que podrían ser apócrifas, lo que luego fue corroborado tras la lectura de banda magnética, se requirió a la División de la Unidad de Análisis de Fraude y Gerencia de Seguridad Transnacional de Prisma Medios de Pago, informe acerca de quienes serían los legítimos titulares de las tarjetas secuestradas.
Constatado el dato, se solicitó al Juzgado Nacional en lo Penal de Rogatorias y a las Unidades Fiscales e Investigación, le tome declaración testimonial a los 13 damnificados, cuyos nombres figuraban como titulares de las tarjetas, de modo de poder determinar si alguno de ellos había realizado alguna compra en Ushuaia.
Como parte de la investigación, personal de la División de Delitos Complejos de Ushuaia fue comisionado a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, para realizar tareas tendientes a determinar el domicilio en que los imputados estuvieron, lo cual se desprendió del análisis de teléfonos celulares secuestrados.
De ese allanamiento , efectuado el 10 de octubre, en Córdoba al 6000, se secuestró una variedad de elementos relacionados con la clonación de tarjetas (tarjetas blancas, tarjetas de color gris, máquinas embosadoras, impresoras, lectograbadoras, dispositivos de inmersión profunda para la lectura de bandas magnéticas, sobre boquillas, dispositivos de captación de imágenes y una cantidad aproximada de 245 tarjetas ).
La modalidad “skimming” consiste en dispositivos que se colocan en cajeros, monederos electrónicos, saldo-maticos, pin pad, POS, skimmer, puertas de acceso, entre otros, para obtener en forma fraudulenta la banda magnética y el PIN de una tarjeta electrónica.
Esto, luego es clonado o copiado, y se realiza el cardado, que son los registros que utilizan los –skimmers- o clonadores vía Internet o cajeros automáticos, con el fin de verificar el saldo de las tarjetas electrónicas clonadas, mediante compras con montos pequeños para que el usuario o cliente no se alerte de la perdida, retiro o transferencia.