TOLHUIN.- El comienzo del año se destacó en esta ciudad por la gran cantidad de reclamos y denuncias que elevaron los vecinos del barrio Islas del Sur quienes se ven perjudicados por las constantes fiestas clandestinas que se realizan en la que se denominó “La Casita Azul” que se encuentra ubicada en calle Adolfo Alsina, entre Cámpora y Perón en la periferia de esta ciudad. Cabe recordar que en este lugar existe una casa de grandes dimensiones en la que, desde que comenzaron a flexibilizarse las condiciones por pandemia, se llevan adelante diversas fiestas que, según los vecinos, derivan en disturbios y desmanes por parte de los que concurren a ese lugar.
Impunidad
Las fiestas que fueron denunciadas de manera constante por los vecinos del lugar no cesaron a pesar de la presión mediática y de las formalidades que los vecinos imprimen para que las autoridades tomen cartas en el asunto que, hasta el momento, no dio resultados.
Este fin de semana no fue distinto a los anteriores. En el lugar hubo una fiesta a la que concurrieron menores y en la que, según vecinos, hay alcohol y no existe ningún tipo de controles.
Lo cierto que alrededor de las 09:30 de este domingo, hubo gran disturbio y peleas entre jóvenes, luego de una fiesta que se extendió por toda la noche. De inmediato los vecinos llamaron al 101 y se presentó personal policial. En ese momento, una persona fue detenida luego de producir daños en vidrios y otros sectores de la vivienda cuando aún había gente de fiesta dentro del lugar.
Esta persona que, según información extraoficial, fue detenida, indicó que su sobrina, menor de edad, se encontraba dentro del lugar por lo que intentaba sacarla por la fuerza.
Ante esta situación, se generó un gran operativo policial quienes cercaron el lugar a la espera de una orden de allanamiento judicial. En esa espera, tres jóvenes menores, trataron de escapar del lugar pero fueron aprehendidos por la policía.
En medio de los disturbios y la tensión, el responsable de la vivienda, recordó que el Presidente Alberto Fernández hizo una fiesta en medio de la pandemia por lo que “yo puedo hacer una fiesta con amigos y amigas”.
Luego de horas de espera de una orden por parte de la Justicia, los efectivos policiales se retiraron del lugar sin constatar nada.
Según información extraoficial, la orden de allanamiento o de otro tipo de diligenciamiento judicial jamás llegó por lo que se decidió retirar a los efectivos del lugar.
Esta situación generó mucho malestar en los vecinos quienes ahora bautizaron el lugar como “La Casa de la Impunidad” ya que, según indican, las autoridades les aseguran que no pueden hacer nada al respecto porque es una vivienda particular y todo lo que ocurre adentro del lugar está dentro del ámbito privado.
