RIO GRANDE.- El 30 de octubre, se desarrolló la recepción de los corredores de todo el mundo en el Campamento Europa y las condiciones no podían ser peores. Fuertes lluvias y vientos dejaban imposible el alojamiento de los corredores por lo que la organización tuvo que maniobrar rápido para conseguir trasladar la comitiva al polideportivo de Algeciras, lugar donde finalizaría la competencia el domingo 4 de noviembre, después de seis días de competición y de convivencia en la edición Euráfrica de 2018.
En esta competencia, la riograndense Yanina Guillán, fue la representante fueguina en la Intercontinental 80 que involucró a sólo 5 argentinos que compitieron en el desafío de un total de 500 participantes de todo el mundo. La prueba se desarrolló en tres etapas distribuidas en tres días donde se disputaron diferentes distancias y niveles de dificultad.
“Fue una experiencia única y diferente, muy deportiva, pero sobre todo muy humana, con una organización muy compleja, que se desvivido por los corredores, sensacionales los voluntarios y los fisios que estuvieron pendientes de cada detalle y necesidad de los corredores. Máxima experiencia la vivida y la cual deseo volver a experimentar”, señaló la riograndense en contacto telefónico con este medio.
Etapas
La espectacular #VisitGibraltar Vertical Race inauguró el 31 de octubre la competencia con un recorrido de 4 kilómetros entre Punto Europa y O’Hara’s Battery, con 500 metros de desnivel positivo.
Al día siguiente, la actividad deportiva se trasladó al Parque Natural de Los Alcornocales. En dos tramos diferenciados, de 27 y 50 kilómetros en función de la modalidad intercontinental escogida, los participantes descubrieron algunos de los parajes de mayor belleza de la provincia de Cádiz, como el Sendero del Prior, el Pico Las Mulas o la Garganta del Capitán.
El broche a la tercera edición intercontinental de Eurafrica Trail lo puso la ascensión al Jbel Musa, con un recorrido de 25 kilómetros especialmente técnico que puso a prueba a los corredores. Desde el punto más alto de la gran masa de piedra caliza, la ‘mujer dormida’ despertó para brindar a los participantes unas espectaculares vistas del Estrecho de Gibraltar.
La meta en Belyounech convirtió a todos ellos en intercontinentales en una edición que presentó un recorrido renovado para unir las Columnas de Hércules de Calpe y Abyla.
Cabe destacar que participar en la Intercontinental 80 requiere de experiencia en pruebas de montaña técnicas y de larga duración, y de un buen estado de forma, para cumplir con las distancias y tiempos de corte con garantías.
