BUENOS AIRES.- El pasado 9 de marzo ingresó a la Argentina un turista de nacionalidad rusa, que pasó por Buenos Aires, Misiones e incluso algunas zonas del Uruguay. Cinco días más tarde desarrolló un cuadro febril, que desembocó en un diagnóstico de sarampión.
Por eso, la cartera de Salud argentina hizo público el itinerario del turista, con el objetivo de informar a los ciudadanos dónde pasó unos días antes de volver a Buenos Aires para terminar su viaje el 23 de marzo.
De esta manera, apunta a advertir a las personas que viajaron en los mismos medios de transporte en ese periodo o que compartieron trayecto con él con el fin de evitar la propagación del virus.
El parte oficial emitido por la institución oficial aseguró que el paciente "circuló por estas ciudades durante el período de transmisibilidad" de la enfermedad vírica.
En el texto, la cartera se refirió "a aquellas personas potencialmente expuestas que presenten fiebre y erupción cutánea a consultar inmediatamente a los servicios de salud informando el antecedente", para que consulten con sus médicos de cabecera la posibilidad de infección.
Es importante aclarar que, según pudo saber la Secretaría de Salud, el viajero no tenía antecedentes de vacunación conocidos cuando entró al país.
El pasado julio se confirmaron en el país tres casos de sarampión en Argentina, un niño de cinco meses, una niña de seis y de un niño de 10 meses, este último residente de la provincia de Buenos Aires.
Antes de la aparición de estos tres casos, el último registro de sarampión autóctono que se había verificado en Argentina era del año 2000 y desde entonces solo se habían registrado casos importados o relacionados a la importación (32 en total).
¿Qué es el sarampión y cuáles son los primeros síntomas?
Es una patología que suele aparecer en niños, incluso puede llegar a ser mortal para los más chicos, pero también puede manifestarse en adultos. Aunque las tasas de mortalidad se han reducido en todo el mundo a medida que se administra la vacuna contra el sarampión a más niños, la enfermedad todavía es responsable de más de 100.000 personas cada año, la mayoría menores de 5 años de edad.
Es importante aclarar que la patología tiene un período de incubación de entre 10 y 14 días, por lo que no presenta síntomas de manera inmediata después del contagio. Una vez transcurrido ese tiempo, los pacientes suelen presentar fiebre, tos seca, resfrío, dolor de garganta y conjuntivitis. Además, es común que aparezcan manchas blancas con centro blanco azulado y fondo rojo dentro de la boca y sarpullido de manchas grandes y planas en la piel.
EL sarampión es una enfermedad que ocurre en etapas secuenciales durante un período de dos a tres semanas. La infección e incubación, tal como se estableció anteriormente, se da entre los primeros 10 a 14 días y es una etapa en la que no se presentan síntomas.
Luego de ese tiempo, aparece una primera manifestación de la enfermedad, que es relativamente leve -puede durar hasta dos o tres días-.
Por último, aparece la enfermedad aguda, junto con la erupción cutánea. Si bien se presenta originalmente en el rostro, durante los próximos días, la erupción cutánea se esparce
por los brazos y el tronco, y luego por los muslos, las piernas y los pies.
La enfermedad puede durar varios días, pero no siempre es contagiosa para otras personas. El período de contagio dura aproximadamente 8 días, que se extienden desde 4 días antes de que aparezca la erupción y finaliza cuando la erupción ha estado presente durante 4 días.