SALUD

INVENTO ARGENTINO

Crean máscara 3D para la reconstrucción de un rostro con quemaduras

Con el objetivo de mejorar los métodos tradicionales, cirujanos plásticos del Hospital Italiano realizaron un procedimiento inédito en el que desarrollaron una máscara personalizada con escaneo e impresión 3D para facilitar la fijación del injerto y lograr una buena remodelación de las cicatrices.

Crean máscara 3D para la reconstrucción de un rostro con quemaduras

ARGENTINA.- Los cirujanos saben que el rostro es una geografía complicada para trabajar en caso de quemaduras profundas. La convexidad de la nariz, la concavidad de las mejillas y de las órbitas oculares, sumado a que el paciente tiene que poder respirar, ver y alimentarse hacen que el vendaje -que puede hacerse en otras partes del cuerpo- no sea una opción. Con el objetivo de mejorar los métodos tradicionales, cirujanos plásticos del Hospital Italiano realizaron un procedimiento inédito en el que desarrollaron una máscara personalizada con escaneo e impresión 3D para facilitar la fijación del injerto y lograr una buena remodelación de las cicatrices.

"Cuando uno se quema y se destruye toda la piel, hay que poner piel nueva. Esa piel nueva, si no está bien fija, no prende. Si tenés una quemadura en el muslo, el muslo es una estructura cilíndrica, hacés el injerto y con una venda de gasa lo apretás fuerte, le sumás una venda elástica y eso prende. En la cara eso es imposible", afirma en diálogo con Clarín, Horacio Mayer, subjefe del servicio de Cirugía Plástica del Hospital Italiano de Buenos Aires.
El médico dice que con los procedimientos tradicionales "hay hacer maravillas para poder fijar los injertos" que, en una primera etapa, se basan en comprimirlos a través del uso de algodones, gasas, apósitos e hilos, algo que no siempre culmina con resultados exitosos, sobre todo en caso de quemaduras extensas. En una segunda etapa, aproximadamente un mes y medio después, cuando las heridas ya están cicatrizadas, se cubre la cara del paciente con yeso para tomar un molde con el que luego se realiza una máscara de policarbonato que continúa aplicando presión sobre los tejidos.

A fines del año pasado, Mayer y Hernán Aguilar, médico del servicio de Cirugía Plástica y Coordinador Quirúrgico del Área de Quemados de la Unidad de Terapia Intensiva de Adultos se apartaron de esos métodos que se vienen utilizando hace casi 40 años. "Lo fabuloso que tiene el escaneo es que se le puede hacer al paciente ni bien se quemó", dice Mayer. El paciente era un hombre de 38 años que había sufrido quemaduras en el 40% de su cuerpo a raíz de la explosión de su auto.

"Con un software que se usa para simular resultados en cirugía estética, escaneamos la cara del quemado. El escaneo logra una imagen tridimensional perfecta de la cara. Con una impresora 3D se imprime la máscara que calza perfectamente en el rostro, lo que permite asegurar el injerto en su lugar y que prenda en su totalidad, como pasó", explica Mayer. El material utilizado es polímero 100% biodegradable, se puede esterilizar sin inconvenientes y es sumamente económico (cuesta 500 pesos el rollo).

Fuente de la Información: clarin.com

¿Compartís la nota?