RIO GRANDE.- Los trabajadores de la empresa Textil Río Grande enfrentan una situación crítica y creciente incertidumbre debido a la ausencia de la empresa en las audiencias convocadas por las autoridades del Ministerio de Trabajo para tratar sus reclamos. Al respecto, Walter Hernández, delegado de los empleados, expresó su preocupación en una entrevista con Radio Fueguina, destacando que la empresa no se ha presentado en las últimas cuatro audiencias, lo que ha generado tensión y desconfianza entre los trabajadores.
"Hoy teníamos una nueva audiencia, la cuarta, a la que la empresa no se presenta. Avisaron esta mañana que no asistirían. Nos informaron que el lunes al mediodía habrá una reunión por Zoom con las autoridades de Buenos Aires. Volveremos a insistir para conocer cuál es la decisión y la jugada de la empresa", explicó Hernández.
El delegado señaló que la empresa parece estar ganando tiempo intencionalmente, lo que ha llevado a muchos trabajadores a optar por el retiro voluntario debido a la difícil situación económica que enfrentan. "Lamentablemente, no les queda otra opción. La empresa, con el desgaste y al no asistir a las audiencias, empuja a los compañeros a arreglarse. Desde julio no cobramos nuestros salarios, lo cual es terrible para un trabajador", subrayó.
Respecto del retiro voluntario, Hernández detalló que los pagos se están realizando en 12 cuotas y que la indemnización no alcanza el 100% de lo que les correspondería. "Hemos calculado con contadores que se acerca a un 70%, lo cual no es suficiente. Vamos a seguir peleando hasta las últimas consecuencias para que se nos pague el 100% de las indemnizaciones si la fábrica cierra", enfatizó.
La situación se agrava con rumores sobre una posible venta de la empresa, lo que aumenta la incertidumbre entre los empleados. "Los rumores de que la fábrica está vendida están instalados desde hace tiempo. No sabemos si es cierto, pero el desenlace será el mismo para nosotros. La empresa quiere sacarse a los trabajadores de encima", comentó Hernández, agregando que muchos de los empleados tienen entre 15 y 30 años de antigüedad, lo que representa un alto costo en términos de indemnizaciones para la empresa.
A pesar de los retiros voluntarios, la situación sigue siendo insostenible para aquellos que aún forman parte de la empresa. "Hoy somos alrededor de 35 los que seguimos por la vía legal, reclamando nuestros salarios caídos. No hemos recibido ningún telegrama de despido, por lo que seguimos perteneciendo a la empresa", señaló.
Hernández concluyó mencionando que esperan obtener novedades en la audiencia por Zoom programada para el próximo lunes con directivos de Buenos Aires. "Queremos escuchar de boca de ellos cuál será el futuro de la empresa y el nuestro, y cómo nos van a pagar. Seguiremos rechazando estos retiros voluntarios y veremos qué propone la empresa", afirmó el delegado.