RÍO GRANDE

CRISIS

Preocupa la situación de la industria fueguina

El intendente de Río Grande, Gustavo Melella se mostró preocupado por la situación en la que se encuentra la industria fueugina. “Nos genera mucha preocupación la situación de la industria en la provincia”, enfatizó el Mandatario municipal.

Intendente Gustavo Melella.
Intendente Gustavo Melella.

RIO GRANDE.- El intendente, Prof. Gustavo Melella, se refirió a la creciente ola de despidos y suspensiones que sufren los trabajadores industriales de esta ciudad. “Nos genera mucha preocupación la situación que se está viviendo”, dijo.
“Desde hace tiempo venimos advirtiendo que la crisis es grave, que hay muchas familias que se están quedando sin trabajo y que muchos vecinos están pasando un momento de mucha dificultad económica”, recordó.
En este sentido, el Jefe Comunal aseguró que “como lo dije anteriormente, no somos profetas del caos, simplemente decimos lo que ocurre y nos ocupamos para tratar de ofrecer soluciones que amortigüen el impacto de la crisis sobre todo en los que menos tienen”.
“No hay que esconder la realidad, porque eso no soluciona nada”, dijo y recalcó que “en Río Grande las dificultades económicas son muy graves y no sólo repercuten en el sector de las fábricas, sino también en el comercio y en toda la cadena de generación de empleo”.
Melella destacó también que “desde el Municipio estamos implementando muchas políticas de capacitación, de generación de autoempleo y de apoyo a emprendimientos productivos, pero es necesario que los otros niveles de gobierno también contribuyan porque las políticas que se están llevando adelante a nivel nacional, acompañadas por el Gobierno Provincial, van en contra de los trabajadores y de los más vulnerables”.
“Seguimos como siempre abiertos al diálogo y dispuestos a colaborar con aquellas propuestas que generen empleo, inclusión y que contribuyan a que nuestros vecinos estén un poco mejor”, agregó. 
Finalmente, Melella insistió: “en los últimos días vemos como muchos familias ven complicada su situación, por un despido, una suspensión. Vemos que hay empresas, no solo electrónicas sino también textiles, que plantean un panorama complicado y hasta funcionarios nacionales ahora están admitiendo que se vivirán, por lo menos, seis meses de recesión. Creo que es momento que mancomunadamente se trabaje para ver cómo se trabaja para encontrar alternativas y que el impacto sea más leve. Pero siempre hablando con la verdad, no escondiendo la tierra bajo la alfombra”. 

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