RÍO GRANDE

UN EJEMPLO

La EPEIM realizó una gran jornada de limpieza de las playas de Río Grande

En el marco de su aniversario, la EPEIM organizó una masiva jornada de limpieza en la playa de Río Grande. La actividad contó con la participación de más de mil personas, incluyendo instituciones locales, empresas y vecinos, quienes se unieron.

La EPEIM realizó una gran jornada de limpieza de las playas de Río Grande

RIO GRANDE.- Este sábado, la Escuela Privada de Educación Integral Marina (EPEIM) llevó a cabo una nueva jornada de limpieza en la playa de Río Grande como parte de las actividades por su aniversario. La iniciativa, que se realiza anualmente, tuvo una participación destacada este año, con más de mil personas colaborando en la recolección de basura a lo largo de 20 kilómetros de costa, desde Cabo Domingo hasta el Colegio Antártida Argentina en la Margen Sur.

La rectora de la escuela, Erica Vittorangeli, expresó su satisfacción por la magnitud del evento y la gran convocatoria. “Cumplimos años y la EPEIM lo festeja todos los años limpiando la playa. Este año abrimos la convocatoria y se sumaron entidades como Estepa Viva, el Municipio de Río Grande, TotalEnergy y Áreas Protegidas del Gobierno, además de muchas otras instituciones y colegios”, comentó. Vittorangeli también destacó que la tarea cubrió una extensa distancia y que el número de participantes, si bien difícil de calcular con exactitud, fue considerable, superando las expectativas con la presencia de diversos colegios, la Universidad Nacional de Tierra del Fuego (UNTDF) y vecinos comprometidos.

Un esfuerzo comunitario por el medio ambiente

La jornada de limpieza no solo consistió en recoger basura, sino que también buscó generar conciencia sobre la importancia de cuidar el medio ambiente y proteger la biodiversidad local, que incluye a las aves costeras, como el playero rojizo, que habita en la zona. Entre los residuos más comunes encontrados se destacaron botellas de plástico, restos de chapas oxidadas y fragmentos de microplásticos.

“Nos hemos encontrado con mucha basura, especialmente botellas de plástico y hierro oxidado en algunos sectores. En otros, la basura es más orgánica, pero siempre hay mucho plástico, que es lo que más daño hace”, explicó Vittorangeli, subrayando el impacto ambiental negativo que estos residuos generan. Los participantes también señalaron la importancia de esta actividad para dejar la costa más habitable tanto para los seres humanos como para la fauna local.

Convocatoria abierta a toda la comunidad

Además de la participación activa de los estudiantes de la EPEIM y otras instituciones educativas, la convocatoria estuvo abierta a toda la comunidad. Desde las primeras horas de la mañana, familias, grupos de amigos y voluntarios se sumaron a la limpieza, con entusiasmo y compromiso. Los organizadores, junto con los participantes, destacaron la importancia de esta actividad no solo por su impacto inmediato en la limpieza de la costa, sino también por el valor educativo que tiene para los más jóvenes, quienes aprenden sobre el cuidado del medio ambiente de manera práctica.

“Es un sentimiento muy lindo poder ayudar. Aunque ya sabemos que el medio ambiente está bastante dañado, pequeños gestos como este pueden marcar una gran diferencia a largo plazo”, comentó uno de los participantes.

Una problemática persistente

A pesar de los esfuerzos realizados, la cantidad de basura encontrada este año superó la de ediciones anteriores, lo que refleja una problemática persistente en la preservación del medio ambiente. Según los organizadores, la recolección de residuos fue más abundante que en años anteriores, lo que evidencia la necesidad de seguir trabajando en la concientización sobre la gestión de residuos y la protección del entorno natural.

“No me esperaba tanta basura este año. Llevamos menos de una hora y ya llenamos más de tres bolsas. Es alarmante, pero también es una oportunidad para seguir creando conciencia sobre el impacto que nuestros residuos tienen en el ambiente”, señaló otro de los participantes.

Un mensaje a la comunidad

Uno de los mensajes más reiterados durante la jornada fue el llamado a la responsabilidad individual. “El mundo no es un tacho de basura gigante. Es el hogar de todos nosotros y sin él no podríamos vivir. Es fundamental que la gente tome conciencia y se lleve su basura hasta encontrar un lugar adecuado donde depositarla”, insistieron los organizadores.

Con esta iniciativa, la EPEIM y las instituciones participantes no solo celebran un nuevo aniversario, sino que también refuerzan el compromiso de la comunidad de Río Grande con el cuidado del medio ambiente y la preservación de la costa, una tarea esencial para asegurar un futuro más sostenible para las próximas generaciones.

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