Un control rutinario de tránsito terminó con incidentes en Chacra IV

Un control vehicular llevado a cabo por personal de la Dirección de Tránsito del Municipio de Río Grande, en conjunto con la Policía de Tierra del Fuego, terminó con una gresca generalizada que volvió a involucrar a jóvenes vándalos de Chacra IV, quienes hace una semana protagonizaron un hecho de similares características.

Todo comenzó cuando al caer la tarde, en un control se detuvo a un Volkswagen Gol de color gris cuyo conducto realizó una mala maniobra en avenida San Martín y Cortez. Ante esta situación, efectivos policiales procedieron a detener al conductor y mientras era retirado de vehículo, decenas de jóvenes llegaron desde los edificios de calle Garibaldi para defender al conductor.

Ante el ataque con todo tipo de elementos contundentes, los efectivos policiales decidieron replegarse y evitar así una gresca mayor que pudiera perjudicar a los vecinos de la zona, afectados a diario por el accionar inescrupuloso del mismo grupo de desacatados.

Al regresar al barrio, el grupo atacó a piedrazos el sistema de video vigilancia urbana, dañando el panel de control del mismo. Esto motivo a que los efectivos policiales avanzaran sobre la zona, buscando disuadir a la turba.

Hubo corridas, botellazos y piedrazos de parte de los malvivientes mientras que los policías debieron recurrir a disparos con balas de goma, hecho que motivó a los jóvenes a refugiarse en los edificios de calle Garibaldi.

Lo insólito del caso es que muchas madres de los jóvenes apañaron el accionar de sus hijos y hasta recriminaron de forma violenta a los efectivos policiales por la acción disuasiva. Como saldo, la gresca dejó a tres policías heridos por elementos contundentes.

Allanamientos

Por la noche del sábado, y a partir de los sucesos acaecidos durante la tarde, la jueza subrogante de turno, Dra. Cecilia Incardona, dispuso sendos allanamientos en viviendas identificadas en la zona, donde el resultado de las pesquisas permitió dar con elementos que habían sido denunciados como robados.

Para llevar a cabo los allanamientos hubo un importante despliegue policial, con la División Servicios Especiales tomando parte de la acción, tal cual sucediera hace siete días en la misma zona.

Así, personal policial y judicial allanó un departamento en avenida San Martín 3339, perteneciente a la familia Canaviri, y además se realizó una acción similar en Garibaldi 3117, vivienda que es propiedad de la familia Carrión.

En el primero de los allanamientos se logró encontrar un revolver calibre 38 largo caragdo con todas sus balas, procediéndose al secuestro del mismo y la detención del propietario del departamento. En el segundo domicilio se secuestró un revolver calibre 38 con el faltante del tambor y cinco plantas de marihuana.

Asimismo, se produjeron luego dos allanamientos en Garibaldi 3237 y en la altura 3285 de la misma calle. Si bien no se brindaron datos sobre los propietarios de dichas viviendas, se supo que fueron hallados elementos que hace pocos días habían sido denunciados como robados por vecinos de otros sectores de la ciudad.