Tierra del Fuego, con menor esfuerzo fiscal para sueldos docentes

Las provincias de Santa Fe, Buenos Aires y Córdoba, en ese orden, son las que más recursos destinan al pago de salarios docentes, si se considera no el monto de los ingresos en términos absolutos, sino el esfuerzo que hace cada jurisdicción en relación con los recursos totales per cápita que recibe.

En el otro extremo, Santa Cruz, Tierra del Fuego y Formosa son las tres jurisdicciones en las que existe la relación más baja entre los recursos por habitante percibidos por la administración pública y el dinero destinado a los maestros.

Los datos surgen de un ranking elaborado por el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF). El estudio está referido a un índice que muestra cuánto se destina anualmente a un maestro primario con diez años de antigüedad en el cargo, por cada peso de los recursos que va a las arcas fiscales provinciales, medido per cápita. El costo considera tanto el salario en bruto y los adicionales, como las cargas contributivas a cargo del empleador.

En el caso de Santa Fe, ese índice es de 0,80, en tanto que en Buenos Aires y Córdoba llega a 0,79 y a 0,75, respectivamente. Le siguen las provincias de Salta, 0,58, y Tucumán y Corrientes, con un índice de 0,52.

En el otro extremo, en Santa Cruz hay 0,21 peso destinado al pago a un docente, por cada peso que llega a la jurisdicción por diferentes conceptos de recaudación. La provincia sureña es la que paga el sueldo docente más alto, con un monto neto de alrededor de $ 4800 (por jornada simple y diez años de antigüedad), cifra bastante superior al promedio nacional, cercano a los $ 3100, aunque vale tener en cuenta que el costo de vida en las tierras patagónicas es también más elevado que en otras latitudes.

Sin embargo, en el listado ordenado según el esfuerzo fiscal en relación con los recursos, esa jurisdicción, que tuvo este año un elevado nivel de conflicto gremial, con 59 días de paro, queda última. Tierra del Fuego, en tanto, penúltima, con un índice de 0,24 pesos por cada peso recaudado.

La ciudad de Buenos Aires, donde el sueldo de un docente con diez años de antigüedad y en un cargo, es de alrededor de $ 2900 mensuales, luego de los descuentos, se encuentra en un nivel más intermedio en el ranking elaborado por el IARAF, con un índice de 0,49, cercano a los de San Luis y Entre Ríos, de 0,48.

El estudio se propone demostrar, más allá de cuál sea el nivel de los salarios docentes, qué importancia relativa le otorga cada gestión a la educación, "debido a que -según afirma el informe- el principal costo al que se enfrentan los prestadores del servicio educativo es el laboral".

Argumentos relativos

Según el análisis del IARAF, al ver la brecha que existe entre una provincia y otra al medir los salarios pagados a sus docentes, podría buscarse una explicación en las restricciones presupuestarias.

Sin embargo, se señala que, tras observar la vinculación del nivel de recursos locales con la erogación en ese servicio básico, se concluye que hay otros elementos en juego, y, en tal sentido, se mencionan el poder de negociación de los sindicatos docentes, los proyectos políticos de algunos gobernantes que focalizan su interés en el sector, y las características propias de cada provincia y de sus sistemas educativos.

El análisis del centro de estudios cordobés muestra, por otra parte, una amplia dispersión, según la provincia, de la relación que guarda el salario docente con la remuneración promedio de los trabajadores del sector privado.

La distancia de ingresos entre un grupo y el otro de empleados es más amplia en provincias donde existe incidencia de actividades con elevados ingresos, como la petrolera o la de industrias beneficiadas con un régimen de promoción industrial, como Tierra del Fuego, que es la tercera jurisdicción si se cuenta en los primeros lugares a las que tienen menor relación entre los salarios docentes y el promedio de los privados.

Chubut y Neuquén, donde por cada peso que gana un asalariado privado los maestros cobran 0,37 y 0,39 pesos, son las provincias con menor relación, seguidas por la Capital Federal y Buenos Aires.

En cambio, donde más se acerca la cantidad de dinero que llega a los docentes a la remuneración de otros trabajadores, es en La Pampa, Tucumán y Chaco, con relaciones de 0,92, 0,89 y 0,82 en cada caso.