USHUAIA.- Las autoridades dieron a conocer la carta que escribió Matías Rodríguez antes del desenlace fatal. El escrito, que lleva la firma del extinto senador nacional por Tierra del Fuego, expresa: "Esta madrugada del 18 de octubre encontré a Walter Vuoto y Laura Ávila en la habitación matrimonial de la casa de Walter. Me confesaron ser amantes hace tiempo. Mi amigo, padrino de bodas y de mi hijo. Ella, mi esposa, amor de mi vida, juntos 22 años".
El cuerpo sin vida de Matías Rodríguez fue hallado en horas de la tarde de ese mismo miércoles en su vivienda de Del Monte al 1900 del barrio Pipo de Ushuaia.
La noticia causó consternación entre sus allegados y en esferas de la política provincial y nacional, que no hallaban explicaciones para la drástica decisión tomada por el legislador fueguino de 41 años.
Con el correr de las horas comenzaron a circular las primeras versiones en torno a la infidelidad de su esposa, concejal kirchnerista por Ushuaia, y el intendente de esa localidad, dirigente de La Cámpora en Tierra del Fuego y amigo de la familia, Walter Vuoto.
En medio de un clima de dolor y consternación, el Municipio dio a conocer un parte de prensa, en el que remarcaba que Rodríguez “era un importante referente dentro del kirchnerismo y del Partido Justicialista. siempre militando junto al intendente Walter Vuoto. Tenía dos hijos”.
El domingo anterior, Día de la Madre, Rodríguez había publicado una foto de su esposa junto a sus dos hijos, acompañada por un texto en el que agradecía “todos los días” a la vida “que nos haya regalado estas dos bendiciones. Sos la mejor mamá que estos cachorros pueden tener. ¡Que tengas un hermoso día de la madre, y un gran cumple!".
A pocas horas de conocerse el suicidio de Rodríguez, en su cuenta personal de X (Twitter), Vuoto hacía público su “profundo dolor por la partida de mi compañero y amigo Matías Rodríguez. Mis condolencias y acompañamiento a familiares, amigos y compañeros ante esta pérdida irreparable”
La Pelea relatada por su expareja
La Concejal de la Cámpora Laura Ávila, esposa de Rodríguez, presto declaración testimonial en sede policial y confirmó que la pareja estaba separada desde mayo. Definió al senador como una persona “obsesiva y detallista” en todo lo que emprendía, y sostuvo que esa obsesión se trasladaba a la relación en pareja.
Dijo que él no aceptaba que su matrimonio se había terminado y que por todos los medios intentaba retomar la relación entre ambos.
Según su relato, el miércoles 18 de octubre, Rodríguez empezó a llamarla en reiteradas oportunidades a las 5:32, pero ella no le contestó. 00Ella se encontraba en la casa de Vuoto, el intendente.
A las 5:40, estando en la casa de Vuoto, escuchó que alguien tocaba la puerta. Desde la habitación, ubicada en el primer piso de la propiedad, oyó que era su expareja, por tu tono de voz, y acto seguido los forcejeos con el intendente. Ávila relató que tras eso Rodríguez rompió la puerta del cuarto y trato de ingresar por la fuerza. Ella le pidió que se calmara e intentó que no ingrese. Él reaccionó, la corrió a un costado y entró. Detrás suyo venía Vuoto para sacarlo de ahí.
Volvieron a trenzarse en una pelea, ella quiso meterse a separarlos para evitar que la situación se agravara y fue cuando Rodríguez cayó al piso y se golpeó con la puerta. Al incorporarse, notó que él tenía un corte en la ceja izquierda y había manchas de sangre en el lugar. No obstante y pese a detallar la pelea entre ambos, la Concejal nada dijo de los golpes en la zona lumbar y las piernas los cuales serian producto de reiteradas patadas que habría recibido en Senador quien a criterio de los forenses habría estado cubriéndose en posición fetal.
Los allanamientos. Una valija roja y faltantes electronicos
La declaración de los custodios del senador Rodríguez y de su secretaria despertaron dudas en la investigación judicial, sobre todo en torno a una valija roja que su secretaria guardaba en su casa y fue llevada al domicilio del dirigente camporista por uno de sus custodios horas antes del trágico desenlace.
La investigación por testimonios y mensajes de telefonía ya logró reconstruir los últimos momentos de vida de Matías Rodríguez, y la interacción con su secretaria Valeria Aciar, como sus custodios el policía provincial Leguizamon y un policía federal de apellido Miño.
En esa tarde Rodríguez pidió a Aciar que le acerque una valija que ella guardaba en su domicilio, del tipo de viaje, rígida de color rojizo y con candado.
La secretaria se comunica con uno de los custodios que traslada tal efecto al domicilio de Rodríguez una hora antes de que se disparara, ante lo cual se presume en esa valija iba el arma Glock calibre 9 milímetros.
Luego de la tragedia, en la vivienda se encontró el arma de fuego pero nunca la valija, de la cual se desconoce la totalidad de su contenido. Es sugestivo que en uno de los mensajes entre los custodios uno deslizara la posibilidad de que tuviera dinero, casi en tono sarcástico.
Lo que más genera dudas es que el custodio Miño en su testimonial jamás mencionó este episodio de la valija, por lo que se plantea reiterar su declaración.
Finalmente resulta sugestivo también que en toda la vivienda haya sido incautado solamente un celular, cuando se conocía que Matías Rodríguez poseía más de un celular, además de otros dispositivos informáticos de los cuales la vivienda no contaba con ninguno de ellos.