BUENOS AIRES.- El senador nacional de la Unión Cívica Radical, Pablo Daniel Blanco, elevó un pedido de informes al Gobierno Nacional, instando a que se aclaren diversos aspectos relacionados con la presencia del buque británico RRS Sir David Attenborough, con bandera ilegal de las Islas Falklands, en aguas argentinas. Blanco busca esclarecer si este incidente será abordado en la "Agenda Malvinas" acordada entre el Presidente Javier Milei y el Canciller británico David Cameron.
El legislador fueguino expresó su preocupación, recordando que este hecho ya ocurrió en enero del año 2023, y exigió conocer las medidas preventivas que se adoptarán para evitar su repetición. Asimismo, solicita información sobre si el contenido del Decreto Presidencial 256/2010, que establece requisitos para la navegación en la región, fue comunicado al Gobierno Británico.
Blanco no escatimó críticas al recordar que, hace un año, la falta de acción por parte de la Cancillería y el Embajador en Chile ante un incidente similar despertó perplejidad. En este contexto, el senador enfatizó la necesidad de que el nuevo gobierno adopte una postura más firme y enérgica para defender los derechos soberanos del país.
El legislador considera imperativo que la "Agenda Malvinas" contemple cuestiones como esta, señalando la falta de claridad sobre los temas que abordará dicha agenda. Blanco destaca la responsabilidad de la ministra Diana Mondino en llevar adelante las conversaciones bilaterales, incluyendo temas vitales para el país.
"Los más altos intereses nacionales están en juego, y el gobierno nacional no puede ignorarlos. Para los argentinos y los fueguinos, la causa Malvinas es sagrada y debe ser defendida activamente y con altura en todos los foros internacionales", afirmó el senador.
En un llamado a preservar la soberanía, Pablo Blanco concluyó su intervención destacando la necesidad de informar al Congreso de la Nación sobre este asunto, ya que las Relaciones Exteriores son un activo valioso para la república, y cualquier descuido en estas funciones sería equivalente a ceder soberanía, algo que los argentinos no están dispuestos a permitir.