RIO GRANDE.-Una nueva designación de un familiar del vocal por los activos en la Obra Social del Estado Fueguino (OSEF), Franco Tomasevich, salió a la luz, avivando la polémica en torno al manejo de la obra social provincial. Esta información se conoce poco después de que se hiciera público el nombramiento de Julieta García, pareja de Tomasevich, como Coordinadora Administrativa con un salario bruto mensual de $3.860.000.
Según la documentación a la que se tuvo acceso este medio, a través de la Nota OSEF-N-9140-2023 y por indicación de la presidente de la Osef, Mariana Hruby, se tramitó la designación de Nadia Ayelén Silva, DNI 37.992.086, como Personal de Gabinete Categoría A. Silva fue destinada a cumplir funciones en el Departamento Atención al Afiliado y Recepción General de la delegación de Río Grande de la Obra Social de la Provincia.
La designación de Silva se amparó en la estructura política del organismo, aprobada previamente por resoluciones de presidencia y directorio, que contempla un número determinado de cargos de Personal de Gabinete en diversas categorías. El documento oficial asegura que se contaba con la planta y partida presupuestaria habilitada para concretar el nombramiento.
Si bien la designación de Nadia Ayelén Silva se concretó el año pasado, la información trascendió en las últimas horas, sumándose a la controversia generada por el nombramiento de Julieta García. Un dato clave que agudiza la polémica es que, según trascendió, fue el propio vocal Franco Tomasevich quien solicitó formalmente el cargo para su pareja a través de un correo electrónico dirigido a la presidenta de OSEF, Mariana Hruby.
Esta nueva revelación generó un nuevo malestar entre los afiliados y trabajadores de la obra social, quienes ven en estos nombramientos un claro ejemplo del uso político y personal de la estructura interna de Osef. La indignación crece en un contexto donde los afiliados denuncian reiteradamente la falta de atención adecuada y las dificultades para acceder a medicamentos esenciales, contrastando con la aparente facilidad para designar familiares y allegados en puestos clave de la institución. La situación pone nuevamente bajo la lupa la gestión de la Obra Social del Estado Fueguino y la transparencia en la designación de su personal.
