RIO GRANDE.- Desde el miércoles de esta semana, los conductores se enfrentan a un nuevo escenario en los surtidores de combustible, ya que la petrolera estatal YPF elevó los precios de sus productos. La suba en los valores de la nafta y el gasoil ya es evidente en las estaciones de servicios de todo el país dejando a los consumidores locales analizando el impacto en sus presupuestos.
Este aumento, que llega en un contexto económico ya complejo, ha generado especulaciones sobre la posibilidad de que otras empresas petroleras que operan en el país sigan el mismo camino. Tradicionalmente, los incrementos de precios por parte de YPF han sido seguidos por ajustes similares en otras compañías del sector. Esto, por supuesto, enciende las alarmas entre los ciudadanos, quienes se preocupan por el efecto acumulativo que estos aumentos pueden tener en la economía doméstica.
De acuerdo con el programa de Precios Justos, el aumento en el costo de la nafta para agosto está limitado a un máximo del 4,5%. El período de ajustes permitidos del 4,5% abarcaba desde el 15 de abril hasta el 15 de agosto. La incertidumbre recae ahora en si se renovará dicho acuerdo y, en tal caso, a qué porcentaje de aumento se ajustarán los precios en los próximos meses.
Este aumento en los precios de los combustibles no solo impacta en los conductores particulares, sino que también afecta a sectores productivos que dependen del transporte, como la industria y el comercio. Las reacciones a estos ajustes no se han hecho esperar, y ahora queda por verse si otras compañías emularán esta medida y cómo afectará a la dinámica económica del país en los próximos meses.
Los valores en Río Grande:
Nafta Súper: $189,1
Nafta Infinia: $241,6
Diésel Infinia: $230,9
Diésel Ultra: $301,7
