PROVINCIALES
Los cinco puntos salientes del contrato entre el Municipio y Línea Siete
31/01/2015. El acuerdo entre el Ejecutivo riograndense y la empresa que prestará el servicio de transporte público de pasajeros prevé notorios cambios en el contrato, comparado con el vínculo que regía para Taikré. El contrato, la tarifa, los colectivos, los controles y aumentos son los puntos salientes que delfuego noticias evalúa en esta nota.
Ante ello, delfuego noticias evalúa los cincos puntos salientes que fueron acordados entre las partes y que apuntan no solo a una mejor prestación sino además a controles más exhaustivos y sanciones más duras en caso de que la nueva empresa decida apartarse de lo rubricado.
El contrato
De acuerdo al convenio firmado entre el Municipio de Río Grande y la empresa Línea Siete Sociedad Anónima, la firma prestará el servicio de transporte público de pasajeros en Río Grande desde el 1 de marzo y por un período de 18 meses consecutivos.
Ese lapso de tiempo podrá prorrogarse hasta 10 años corridos si el Ejecutivo, después de una evaluación exhaustiva, avala la prestación y no realiza mayores objeciones al servicio que brindará la empresa.
La tarifa
En la actualiza, el servicio que brinda Taikré tiene un costo para el boleto único de 4,67 pesos si se abona con tarjeta magnética. El precio se mantuvo congelado durante todo un año y ello generó, según la empresa, la situación actual de déficit en el servicio.
Con Línea Siete se acordó hasta el 1 de abril, conservar la tarifa al valor actual y a partir de ese día hacer efectivo el incremento que definirá el boleto único con un costo de 6,50 pesos con tarjeta magnética y 10 pesos si se abona en efectivo.
Los colectivos
A diferencia de Taikré, Línea Siete pondrá en calle, colectivos de gran porte. El contrato estipula que la nueva empresa deberá contar con 24 unidades en servicio y además, deberá realizar una renovación anual de cuatro colectivos.
De esa manera, se espera que Línea Siete pueda cubrir ampliamente la geografía de la ciudad y a su vez, preste un servicio con colectivos en buenas condiciones a partir del desgaste que sufren en la ciudad por el estado de las calles sin asfaltar, sobre todo en invierno.
Los controles
A diferencia del contrato firmado oportunamente con Taikré, el nuevo vínculo impone controles mucho más exhaustivos y multas realistas, que represente un verdadero dolor de cabeza para la empresa si decide hacer mal las cosas.
Así se busca ganar presencia del Ejecutivo como órgano de contralor y persuadir a Línea Siete respecto a las consecuencias de una deficiente prestación, algo que la gestión de Gustavo Melella nunca pudo imponer con Taikré dadas las laxas condiciones de concesión.
Los aumentos
Quizás uno de los puntos salientes, que con el nuevo contrato evitará extensas discusiones que redundan en tensiones y desgaste político, dada las posiciones diversas que siempre se hacen visibles a la hora de discutir un tema tan sensible como lo es un aumento de tarifa.
De esa forma, para que se haga efectivo un aumento del valor del boleto, se llevara a cabo un análisis técnico, dado que está establecido el mecanismo de actualización y la verificación del mismo correrá por cuenta del Tribunal de Cuentas. En definitiva, si Línea Siete cumple con lo estipulado por el contrato, se actualiza la tarifa y el subsidio.