Llevan un mes las emanaciones y aún se desconocen las causas

Pasado un mes desde la primera jornada donde se percibieron fuertes olores a combustibles en la sala de calderas del Colegio María Auxiliadora, las fuerzas de seguridad intervinientes siguen sin poder detectar la causa de las emanaciones, hecho que ha paralizado la actividad no solo en el establecimiento escolar sino en toda la manzana y las cuadras circundantes.

El pasado 4 de junio fue el primer día donde las autoridades del colegio requirieron la presencia de Bomberos de Policía de Tierra del Fuego, Bomberos Voluntarios y Defensa Civil. Un fuerte olor a combustible, muy similar al del gas oil, salía de la sala de calderas.

Luego de varios días donde la actividad fue sumamente irregular, las emanaciones no cesaban y la principal sospecha pasaba por una posible fisura en los tanques de abastecimiento de la estación de servicio Autosur, que expende combustibles de YPF, emplazada en la esquina de avenida San Martín y Rivadavia, justo enfrente del Colegio María Auxiliadora y a escasos metros la sala de calderas del edificio en cuestión.

Con el correr de los días, diversos organismos de seguridad realizaron sendas mediciones de gases tóxicos, que dieron negativo. Sin embargo, el olor a combustible se percibía de forma intermitente; en algunos momentos más que en otros.

Ello motivó a la suspensión de actividades en el Colegio María Auxiliadora, dada la incertidumbre que generaban las mediciones. Resultaba muy complejo citar al alumnado a clases a la mañana y depender de la medición de gases del mediodía para saber si se podía dictar clases por la tarde.

Incluso varios días, y por precaución, se valló la zona circundante al establecimiento y se cortó la circulación vehicular en la calle Rivadavia. Sin embargo, el olor similar al gas oil, seguía apareciendo de a ratos y a veces, en niveles alarmantes.

Justamente la medición del lunes por la noche -realizada alrededor de las 20.30- puso en alerta a las autoridades. Los registros eran sumamente altos y se procedió no solo al corte total del servicio de gas (un ala del colegio tenía servicio limitado) sino del suministro eléctrico por temor a una explosión.

Con el correr de las horas, los índices medidos mermaron sensiblemente pero la situación no varió. La calle Rivadavia sigue cortada al tránsito, los comercios cerrados, la estación de servicio sin expendio al público y el establecimiento educativo sin clases hasta nuevo aviso.

Las hipótesis

En primer término se temió que los olores fueron producto de una fuga de gas en la zona de calderas. Sin embargo, la inspección realizada por personal de Camuzzi Gas del Sur eliminó toda sospecha y se descartó que el inconveniente se haya generado dentro del edificio educativo.

Luego se temió que se tratara de gases producidos por los efluentes cloacales. Ocurre que la zona donde está emplazado el colegio es una de las más antiguas de la ciudad y las obstrucciones cloacales suelen ser frecuentes.

Una minuciosa inspección en las cámaras sépticas del edificio comprobó que los niveles de oxígeno eran normales, por lo tanto se descartó también la posibilidad de que los líquidos cloacales sean el causante de las emanaciones.

Por último, se barajó la posibilidad de que alguno de los tanques cisterna subterráneos de la estación de servicio hayan sufrido alguna fisura y que se estuviera produciendo un derrame de combustibles en las napas freáticas.

La firma que regenta la estación de servicio asegura que los tanques pasaron sin anomalías las pruebas de hermeticidad. Sin embargo, existe la sospecha que no se haya sellado correctamente viejas cisternas que fueron puestas en desuso hace muchos años, algo que la firma comercial no desmiente ni confirma.

El panorama

Desde el Colegio María Auxiliadora se anunció que las clases siguen suspendidas a lo largo de esta semana y que con el inicio del receso escolar, no habrá mayores novedades. Lo que sí confirmaron es que tras las vacaciones, que concluyen el viernes 20 del corriente mes, si no se está definitivamente solucionado el problema, no retornarán a las aulas.

Por su parte, la firma Autosur sigue sin actividad comercial alguna en su estación de servicio ubicada justo enfrente del Colegio María Auxiliadoras, pero no se sabe con certeza hasta cuando la empresa podría soportar los días de inactividad.

Por otro lado, contiguo a la estación de servicio, un supermercado de la cadena La Anónima no ha cerrado las puertas al público ni un solo día, a pesar de que los empleados aseguran que dentro del salón comercial y sobre todo en el depósito, también se sienten fuertes olores a combustible.