Gobierno entregó dos viviendas al área de Salud Mental

Las tres viviendas restantes, serán reservadas a cubrir las necesidades temporales de pacientes derivados de Tolhuin en tránsito en dicha ciudad, y de profesionales itinerantes, rotantes y/o en tránsito y médicos residentes.

La titular de Salud Mental, Valentina Minieri, señaló que estas dos viviendas son dispositivos para favorecer la externación de las personas que atraviesen una internación en los Servicios de Salud Mental o el Centro de Prevención y asistencia a las Adicciones, y anotó que los inmuebles incorporados a estos lugares de atención “pueden facilitar su inclusión nuevamente en la vida social y, muchas veces, también evitar las internaciones largas que surgen a partir de las crisis que suelen atravesar los pacientes”.

La funcionaria subrayó que el proyecto “está en sintonía con políticas públicas en salud mental de la Provincia, y también se ajusta a la nueva Ley Nacional de Salud Mental”.

En cuanto al destino de las viviendas, la licencianda Minieri señaló que “una está destinada a pacientes hombres, y la otra para las mujeres”, remarcando que actualmente “estamos en el proceso de gestión de compras para poder equiparlas”.

Respecto del sistema de Casas de Medio Camino, dijo que consiste en “la posibilidad de que las personas que tengan alguna problemática de salud mental, puedan ser atendidas en forma estable y convivan dentro de una casa, facilitando que puedan ser acompañados de distintas formas, a través de profesionales y operadores entrenados en salud mental y adicciones, y que acompañan el funcionamiento de esa casa”.

“Pero justamente, como remarcábamos, le permite al paciente manejarse con progresiva autonomía y contar con las disponibilidades del acceso a la vida social que permite el vivir en una vivienda normal”, agregó.

En dos meses estarán equipadas

La licenciada Minieri estimó que las viviendas estarían equipadas “en alrededor de 2 meses”, porque “esto lleva un proceso de provisión de recursos humanos y equipos, que si bien en parte ya se iniciaron las incorporaciones, va a ser reforzado a partir del ingreso de más personal, paralelamente al equipamiento de las casas”.

Respecto de la capacidad que tendrán las Casa de Medio Camino, dijo que “estimamos que se podrán atender un máximo de 4 personas por vivienda y es un dispositivo de atención transitorio hasta que la persona pueda regresar a su vivienda o pueda autovalerse con sus recursos”.

Para reforzar el dispositivo ambulatorio

Por su parte, la jefa del CPA de Río Grande, Gabriela Oña, destacó que “estas nuevas viviendas otorgadas vienen a reforzar el dispositivo ambulatorio con el que se cuenta en esta ciudad desde el Ministerio de Salud para el tratamiento de adicciones y salud mental, a través del CPA”.

Tras señalar que la institución “en esta ciudad no cuenta con un sector de internación”, Oña señaló que “a veces la demanda de pacientes con problemáticas, no sólo de adicciones sino con una conflictiva en relación a la salud metal también, se nos hacía difícil sostenerla sólo con un tratamiento ambulatorio en una institución que funciona de 8 a 16”.

“Así que con el otorgamiento de estas viviendas vamos a poder poner en marcha esta nueva modalidad que permite reforzar la ayuda que podemos dar desde esta institución”, dijo.

La tarea que se realiza

Oña informó que en el CPA “trabajamos de lunes a viernes, y estamos implementando diferentes talleres”, anotando que “algunos se realizan en la sede de la institución, y otros se deben realizar en otros espacios, porque se trata de favorecer la reinserción social y a eso apuntan estas viviendas, a la externación de los pacientes que están en condiciones de estar internados y de convivir en una casa con otros pacientes que estarán acompañados por especialistas”.

“El CPA trabaja para abrir sus puertas”, subrayó, y agregó que “tanto los profesionales como los operadores, ya no trabajan exclusivamente recibiendo la demanda que llega a la institución sino que también lo hacemos afuera, realizando visitas domiciliarias, estableciendo contactos con los diferentes centros de salud para buscar llegar a los pacientes y no necesariamente que estos tengan que venir por su cuenta”.

Estrategias de inclusión

Por su parte, la Subsecretaria de Políticas de Formación e Inclusión, Maricel Eiriz, sostuvo que el proyecto “constituye la generación, desde el Ministerio de Salud, de estrategias de inclusión social que disminuyan las derivaciones que generan desarraigo y limitan las posibilidades de abordaje familiar y con las redes comunitarias de la persona”.

“De esta manera evitamos numerosas internaciones en otras provincias, que muchas veces no mejoran las condiciones de atención sino que se constituyen en cuidados progresivos de la salud respetando los derechos de las personas que atraviesan algún padecimiento psíquico”, subrayó.

En ese sentido Oña insistió en que “nos resulta sumamente favorable esta iniciativa, que no tiene precedentes en la Provincia y es algo que tendremos que ir construyendo entre todos”.