PROVINCIALES

CELULARES, HIDRÓGENO Y AGRO:

Empresas fueguinas buscan ampliar la matriz productiva

Este año la compañía de capitales nacionales Mirgor cumple 40 años. En la planta industrial de 32 mil metros cuadrados que recorrió Ámbito en Río Grande, al norte de Ushuaia, en 1983 se producía el climatizador para el auto Peugeot 504. En esa misma planta, continúa la producción de autopartes, tanto en piezas, como en climatización, pero también en el llamado “infotainment”, es decir, la totalidad de la tecnología de entretenimiento en un auto, desde la placa, hasta la radio y el GPS.

Empresas fueguinas buscan ampliar la matriz productiva

RIO GRANDE.- Ámbito visitó la empresa Mirgor en Tierra del Fuego. Invertirán u$s380 millones en el primer puerto en la ciudad industrial de Río Grande para bajar costos logísticos en hasta 35% y permitir el avance de nuevas actividades, como offshore, hidrógeno y renovables.

Como en cada elección, uno de los temas que se discute es la política industrial y, particularmente, el régimen de promoción de Tierra del Fuego. En una recorrida de Ámbito por la ciudad de Río Grande, desde la empresa Mirgor revelaron sus planes para ampliar la matriz productiva de la provincia, a través de la inversión de u$s 380 millones en el primer puerto en esa ciudad. Fuentes de los equipos económicos de las dos principales coaliciones políticas dijeron a este diario que no tienen planes de modificar el régimen en el corto plazo.

Este año la compañía de capitales nacionales Mirgor cumple 40 años. En la planta industrial de 32 mil metros cuadrados que recorrió Ámbito en Río Grande, al norte de Ushuaia, en 1983 se producía el climatizador para el auto Peugeot 504. En esa misma planta, continúa la producción de autopartes, tanto en piezas, como en climatización, pero también en el llamado “infotainment”, es decir, la totalidad de la tecnología de entretenimiento en un auto, desde la placa, hasta la radio y el GPS.

Además, cuentan con otras 4 plantas en la provincia que suman más de 60.000 metros cuadrados en superficie, y más de 2.500 trabajadores industriales en tres turnos. La producción mensual ascendió a 510.968 unidades de TV, celulares, climatización e infotainment, según el último dato de junio. Es que, si bien Mirgor comenzó en el sector automotriz, hoy su principal unidad de negocios es la electrónica de consumo.

Un puerto desde 2024

El próximo proyecto de la compañía es la instalación del primer puerto Río Grande, y el segundo en la provincia. “Es posiblemente uno de los proyectos que más va a potenciar a Tierra del Fuego en su historia”, aseguran fuentes de Mirgor. Con una inversión de u$s 380 millones que buscarán levantar de capitales privados en la próxima asamblea, intentarán que la construcción arranque a mediados del 2024, y que esté listo para fines del 2026.

El puerto forma parte de una de las iniciativas que tienen que presentar las empresas que forman parte del régimen de Tierra del Fuego para ampliar la matriz productiva de la provincia, en el marco de lo establecido cuando se extendió el régimen por otros 30 años. Sin embargo, en la compañía aseguran que el impacto no será solo para Mirgor: estiman que podría mejorar la competitividad de las empresas por bajar costos logísticos en hasta 35%.

Además, resaltan la posibilidad de “ampliar la matriz productiva”, dado que permitirá descargar 2000 contenedores mensuales, que podrían servir para la actual industria automotriz, electrónica o textil. Pero también para el traslado de equipamiento que requerirán los proyectos en danza de energía eólica, offshore, hidrógeno verde y alimentación.

“Estamos frente a la Antártida y el abastecimiento antártico se hace desde Chile. Argentina podría tener todo, pero le falta infraestructura”, afirmó una fuente de la compañía. El puerto de Ushuaia tiene un mayor uso turístico, mientras que las condiciones climáticas dificultan los traslados desde Chile. Hasta el momento, la provincia autorizó el informe de impacto ambiental, y resta la autorización de la Nación de los trámites de las vías navegables.

El proyecto del puerto fue presentado ante la Secretaría de Industria, junto con otro agro-ganadero. De hecho, Mirgor asegura estar en el puesto 58 en el ránking de empresas exportadoras, por la venta de cereales y oleaginosas. Otras empresas de la isla también hicieron sus presentaciones, pero todavía no hubo aprobación oficial. Esto se da en el marco de la renovación del régimen industrial, que estableció que para que las empresas mantengan los beneficios fiscales y tributarios, deben aportar el 3% de sus ventas a un fondo para la ampliación de la matriz productiva fueguina.

Si bien el régimen industrial fue prorrogado a fines del 2021, suele discutirse públicamente por el costo fiscal de los impuestos que tienen eximidos las empresas, en un contexto donde los partidos debaten cómo bajar el déficit fiscal. Ámbito consultó a Mirgor qué piensan que va a pasar con el régimen: pese a que fue prorrogado, en las empresas siempre hay incertidumbre. “Sería bueno que hubiera institucionalidad, en Brasil nadie discute las actividades industriales que se promocionan”, afirmaron. “Hay toda una provincia que depende de esto”, agregaron.

El futuro del régimen

Según pudo saber Ámbito, ninguna de las dos principales coaliciones realizará cambios en el régimen en el corto plazo. Fue durante la gestión de Alberto Fernández que se decidió la prorroga. Por su parte, el candidato a presidente de UxP, Sergio Massa, al Frente del Ministerio de Economía, incrementó los aranceles para la importación de productos tecnológicos. Sin embargo, también considera que tiene que discutirse el costo fiscal, y se lo pedirá al Congreso durante el debate del presupuesto 2024, tal como hizo el año pasado.

Del lado de Juntos por el Cambio, fuentes de la Fundación Pensar afirmaron que el plan ideal es establecer condiciones óptimas de competitividad para toda la economía, y no regímenes especiales de promoción. Sin embargo, afirmaron que cualquier cambio debería plantearse para un mediano plazo. En tanto, un economista cercano a Patricia Bullrich agregó: “Hay que mejorar la productividad para que los precios de la tecnología sean más competitivos, pero no hay que destruir lo que está, sino construir sobre lo hecho”.

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