TIERRA DEL FUEGO.- El diputado nacional Héctor ‘Tito’ Stefani fue consultado sobre las opiniones del presidente Javier Milei quien había dicho que no acepta ningún tipo de negociación, salvo que quieran aceptar y que quieran brindar sugerencias para mejorar el DNU y la Ley Ómnibus y lo mismo sobre las declaraciones del ministro del Interior, Guillermo Francos, quien dijo que tendrán que las provincias hablar con sus diputados para ver cómo van a votar, porque si no, después no hay plata.
Creo que algunas son declaraciones que no son muy oportunas ni son buenas, pero la Argentina vive hace 40 años en un sistema democrático, y el sistema democrático funciona con el equilibrio de poderes porque el poder legislativo que es el Congreso es un poder independiente, y que tiene toda la intención de ayudar al presidente en su política de cambio, que es amplia, pero es un proceso que lo tiene que pasar y que hay tiempos que no se pueden acortar, porque los proyectos cuando vienen al Congreso tienen un recorrido por comisiones, esas comisiones están integradas por diputados de todos los espacios políticos, eso genera discusión”.
En una entrevista que le brindó a Radio Provincia de la ciudad de Ushuaia, el diputado nacional por Tierra del Fuego explicó que “las comisiones funcionan primero con un grupo de asesores, cada diputado tiene un asesor sobre las comisiones en las que participan. Primero se reúnen los asesores, tratan ese tema, después se reúnen los diputados, vuelven a tratar ese tema, tienen que llegar a un acuerdo para establecer un dictamen. Hay generalmente un dictamen de mayoría y otro dictamen de minoría, no es tan sencillo. Así funcionan los sistemas democráticos, por eso hay equilibrio de poderes. Por ahí la democracia es un poco más lenta de lo que se pretende desde los ejecutivos, pero es como funciona el sistema, no lo podemos cambiar”.
“Estamos trabajando para resolver los problemas en el menor tiempo posible”
Aseguró que “el Congreso está funcionando, estamos en enero, las comisiones están funcionando, los diputados van todos los días al Congreso, yo voy todos los días al Congreso, me parece que es lo que estamos haciendo, estamos trabajando para resolver los problemas en el menor tiempo posible. Pero el menor tiempo posible es un tiempo que no lo podemos apurar”.
Preguntado ¿por qué se obliga a un Congreso ahora a generar todo un debate cuando se podrían haber mandado temas importantes?, evaluó que “es una complicación, que evidentemente sí en algunos aspectos, fue casi buscada por el Ejecutivo, porque si pone dentro de un DNU temas de urgencia, temas de mediano plazo, y temas que podrían haberse tocado en una agenda con bastante más tiempo, obviamente que la cosa se va a complicar. Entonces, y además hay proyectos que son realmente malos. Está bien que no están dentro del DNU, es otro tema que vamos a tener que discutir, el proyecto de la pesca es pésimo, el proyecto de los circuitos uninominales, pésimo también. Son proyectos que complican porque están dentro del mismo paquete y no sé cuál ha sido la estrategia, o si hubo alguna, veremos qué termina pasando. Yo creo que el Congreso tiene su tiempo, que no van a ser los tiempos del Ejecutivo, eso lo tengo claro, y que para mí una estrategia correcta sería abrir la discusión, abrir el DNU y tratar puntos que son vitales, importantes, y dejar otros para darle un poco más de plazo, para más debate y discusión, lo mismo que con la Ley Ómnibus”.
“El jefe de gabinete tiene la obligación de venir al Congreso y siempre me parece que en una medida democrática que los ministros vengan al Congreso a dar explicaciones de lo que están haciendo. Me parece que está bueno que los ministros vengan o que vengan funcionarios. Siempre se ha pedido que vengan. Algunos vienen, otros no lo hacen. Pero me parece que acá el Ejecutivo necesita del Congreso. El Congreso quiere apoyar al Ejecutivo y me parece que hay que mejorar el diálogo y las relaciones entre uno y otro lugar. No veo un Congreso en contra tratando de poner piedras en el camino; veo un Congreso tratando de defender el sistema democrático y me parece que no está mal, está bien”.
“El 95 por ciento de la pesca se exporta sin valor agregado”
Stefani observó que “hay proyectos, como el de la pesca, que no se arreglan modificando algunos artículos. Quizás se arreglen modificando algunos artículos para los empresarios, pero esa no es la pesca de la Argentina. La pesca de la Argentina no es la que quieren los empresarios ni la que quiere el gobierno de turno; la pesca de la Argentina es una ley, que tiene que ser una política de Estado, donde la Argentina dentro de 30, 40 años termine exportando productos de valor agregado hechos en el país con calidad de alimento, con una proteína de calidad. Hoy ya el 95% de lo que se pesca se exporta. Entonces, tiene que haber una política pesquera de la Argentina, que cambie el Consejo Federal Pesquero, que no sea para la Argentina una subsecretaría de Pesca la propia pesca, cuando es uno de los bienes más importantes que tiene la Argentina”.
En ese sentido consideró que “el mar argentino es riquísimo, somos el octavo país en el mundo en tamaño de 194, con la 44 población, es decir, es un país rico y despoblado. Estamos en manos de inversiones de países capitalistas o de China, que nos ven como un botín. Y eso no puedo entender que no lo vea la clase política argentina. Entiendo que no lo vea Doña Rosa, que por ejemplo está escuchando y dice, ¿qué está hablando este tipo? A mí me encantaría que Doña Rosa lo entienda, creo que hay que explicárselo. Parte de la deficiencia de la política es no contarle a Doña Rosa qué es lo que nos pasa. Parece que son proyectos de ley, de políticas de Estado para los argentinos, que necesitan un debate y que no la pueden manejar ni los empresarios ni alguien. Me encantaría conversar con el autor del proyecto, que venga al Congreso y explique qué es lo que él quiso hacer”.
“La Canciller Mondino dijo, ¿cuál es el problema de que vengan los barcos chinos y pesquen acá en nuestro mar? El problema es que los chinos no son argentinos. Los chinos tienen una política de Estado exterior que se llama la Ruta de la Seda, trazada a 60 años a futuro, que la van a seguir paso por paso cada día de acá a 60 años. Y que tienen un consejo, te diría casi de ancianos, de personas de 65 años, que establecen cuál es esa ruta estratégica para China. Entonces, cuando los chinos te ponen un puerto de fertilizante, o una planta de fertilizante, de urea para sacar fertilizante, o te compran el grano en carga, o te compran empresas como Nidera en la Argentina, están pensando que te van a hacer trabajar a los argentinos para producir los cereales, pero ellos se van a quedar con la rentabilidad de todo eso”, advirtió.
“Los argentinos no somos salames”
“Nosotros, que no somos salames, somos argentinos, porque Juan Bautista Alberdi y una cantidad de próceres fueron gente importante en su tiempo en el mundo y hoy tenemos varios argentinos importantes. O sea que no somos salames, sabemos de política exterior. La Canciller no puede decir esa barbaridad. No la puede decir porque lo que estaríamos entregando es nuestra soberanía. No nos estamos entregando nosotros. Estamos entregando el futuro de nuestros hijos y de nuestros nietos. La política nunca es para hoy. La política es la forma de darle trascendencia a la vida. Los seres humanos tenemos una vida cortita. A veces el ser humano se confunde y construye empresas que duran 300 años, casas que duran 200, pero vive 70 ó 75. Y la forma de darle continuidad a lo que los seres humanos hacen, es la política. Entonces los chinos saben qué van a hacer de acá a 60 años. Nosotros estamos todos luchando para que la Argentina no caiga en una hiperinflación. Pero esa lucha de no caer en la hiperinflación, es un dato y hay que ir por esa lucha, pero también tenemos que darnos el tiempo para pensar la Argentina que viene en los próximos 30, 40 años”, expuso.
Tiene que haber cambios en el DNU
Stefani entendió que “obviamente tiene que haber cambios. Si bien no estoy en la comisión del DNU, hay cosas a las que estoy de acuerdo, que a la política argentina le vienen bien, hay cosas que no, y no estoy en los finos detalles. Yo estoy más en el proyecto de la Ley Ómnibus y me ocupo más del tema de la pesca y me estoy ocupando de los circuitos uninominales porque para eso nos ponemos al trabajo. Pero hay cosas que no se pueden aprobar en el Congreso”.
“La 19640 nació por la soberanía de Malvinas”
Consultado si podido hablar con el diputado Juan Manuel López de la Coalición Cívica, quien es muy crítico del régimen fueguino, Stefani entiende que su postura “es producto del desconocimiento que tienen, tanto él como el periodista Carlos Pagni. Primero, no conocen por qué se sancionó la ley 19640 en 1972, porque hablan de una ley de promoción industrial y esa ley de promoción industrial no existe. La 19640 para Tierra del Fuego es una ley de promoción económica y de desarrollo económico y me parece que es una política exitosa de la Argentina. Es lo que hoy quieren hacer en el país, bajar impuestos para que los empresarios vengan e inviertan y que eso genere trabajo y atraiga más inversiones, más empresarios y más trabajo. Lo mismo que se quiere hacer hoy en el país. O sea que es una avanzada del esquema libertario. Es una avanzada Tierra del Fuego. Es una política espectacular de hace más de 50 años. Su origen fue un reclamo de soberanía en las Malvinas, porque para reclamar las Malvinas había que tener un sistema impositivo había que cobrar impuestos para reclamarlas de manera internacional. Y en ese momento el Ejecutivo sancionó una ley en 1972, que fue la ley de promoción económica para decir: ‘Malvinas está en Tierra del Fuego, Tierra del Fuego es una área de manera especial y Malvinas es una zona franca exentada en cuanto a determinados impuestos’. Y esa fue la forma que tuvo el Gobierno nacional de seguir reclamando sobre Malvinas. Así nació la ley en 1972”.
“Hay mucho desconocimiento sobre Tierra del Fuego”
Stefani lamentó que la gran mayoría de los argentinos no sabe el significado geopolítico y económico de la 19640. “A veces creen que Tierra del Fuego es una provincia extranjera en una isla. Hay muy pocos argentinos que saben que compartimos territorio con Chile en esa isla. Hay muy pocos argentinos que saben que un tipo no puede venir en colectivo si tiene que venir un médico a Buenos Aires. Hay muy pocos argentinos que saben que hay que pasar por cuatro aduanas y hacer una cola inmensa con la familia si se tiene que salir en auto hacia el norte; hay muy pocos argentinos que saben que dependemos del pájaro de acero si tenemos familia enferma o tenemos que viajar nosotros. Hay muy pocos argentinos que saben que el clima es inhóspito, que por ahí tenés 20 días, que llueve, que es frío. Hay muy pocos argentinos que saben que la logística es muy deficiente. Y entre esos pocos argentinos está Carlos Pagni y entre esos pocos argentinos está Juan Manuel López. Lo de Pagni es una opinión de él. A mí me gustaría sentarme frente a Pagni y contarle qué es Tierra del Fuego y qué es la ley 19640 o qué es el sistema industrial que tenemos Tierra del Fuego. Porque por ahí Pagni desconoce que Río Chico también es una empresa que está en Tierra del Fuego, que tiene su propia central que le genera la energía eléctrica y que a veces lo salva Río Grande de quedarse sin energía cuando hay un corte y que exporta Silobolsas, que es una idea argentina para más de 80 países. ¿No sabrá eso? Ahora López, peor. Porque López es un diputado nacional, tiene que tomarse un avión, ponerse una camperita, sacarse los mocacines, ponerse unos borcegos y recorrer. Y si no tiene que juntarse con los diputados de Tierra del Fuego y que les cuente a los diputados qué es Tierra del Fuego”.
La macrocefalia argentina
Por otra parte Stefani graficó como una macocefalia el hecho de que gran parte de la población se concentre en el AMBA. “Esto es el aglomeramiento que tiene Argentina que yo estoy totalmente en contra de este sistema, porque es parte de lo que todavía no resolvimos unitarios y federales en la Argentina. Se lleva 3.3% del PBI todos los años desde hace 75 años en subsidios. En el 2022 se pagaron solamente en los primeros 5 meses 2.655 millones de dólares en subsidios al gas y a la luz en el AMBA, donde viven 10 millones de personas hacinadas”.
Agregó que “en CABA viven más de 3 millones de personas, le descontás esos 3 millones, te quedan 7 millones de personas en los 24 distritos que integran el AMBA. En uno solo, que es La Matanza, viven 3 millones de personas. Mucho más que todas las personas que viven en la Patagonia, incluida La Pampa. Entonces, obviamente que yo estoy en contra de todo eso, pero tengo datos, porque lo hemos venido estudiando, pero nosotros tenemos que alzar la voz en Tierra del Fuego. Nosotros tenemos que alzar la voz en la Patagonia para que sepan quiénes somos nosotros los fueguinos y que nos empiecen a respetar y no nos traten como planeros que estamos atrás de un subsidio. Porque la industria fueguina son más de 40 empresas que generan 11.000 puestos de trabajo directos y 9.000 indirectos. Ninguno de los sindicalistas, ni siquiera los que pasaron por el Congreso que fueron diputados, defendieron la ley como la defendemos nosotros a nuestro régimen económico y a su subrégimen industrial”.
“Los empresarios en Tierra del Fuego aportan 100 millones de dólares para aplicación de la matriz productiva (FAMP), ocupan el 30% de la población económica activa de Tierra del Fuego, aportan al Gobierno provincial el 30% de los recursos en ingresos, están generando desarrollo económico, están haciendo un puerto, hay empresarios que han aportado a la pesca, como en Ushuaia, están metidos en el desarrollo pesquero, están dando valor agregado al producto, están generando un trabajo y esos empresarios son argentinos”, valoró Stefani.
Agregó que “no es que la Argentina pone plata, nosotros tenemos un acuerdo con Manaos donde los brasileros nos van a vender los productos porque estos mismos señores que son empresarios, son también importadores. Si se quitan estos incentivos, ¿se sabe cuánto va a recaudar el Estado argentino? Cero, porque con Manaos tenemos cero arancel de importación”.
Sistema Uninominal
Finalmente se lo consultó sobre el cambio en la cantidad de diputados nacionales en el sistema uninominal propuesto en la Ley Ómnibus. “Nosotros somos el 0,4% del electorado en el país. Los 5 diputados que tenemos en Tierra del Fuego ahora lo quieren cambiar al sistema uninominal y vamos a tener un solo diputado que nos represente al pueblo de la provincia y la provincia de Buenos Aires, en ese esquema, va a incorporar 27. No es que se achique al gasto político, pero la Patagonia pierde 16 diputados y la provincia de Buenos Aires incorpora 27 y por eso rechazo este proyecto porque es una barbaridad. Hay que sentarse a trabajar y hay que pelear”.
