RIO GRANDE.- La Facultad Regional Tierra del Fuego de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) graduó a Iara Galichini y Angélica Cárcamo quienes se convirtieron en las más recientes Ingenieras Electromecánicas. Ambas aprobaron su proyecto final y se presentaron ante la mesa examinadora, compuesta por los ingenieros Hugo Bonifacini, Francisco Álvarez, Demian Ferreyra y Aníbal Vallejos, logrando así su ansiado título.
Durante la última semana, las flamantes profesionales presentaron y defendieron con éxito sus proyectos ante la mesa examinadora. En una entrevista con Prensa Universitaria, compartieron detalles sobre el esfuerzo, sacrificio y satisfacción que implicó cursar una carrera universitaria y el gran logro de haberse recibido.
Iara Galichini
Una de las graduadas, Iara Galichini, de 25 años, expresó que su trayectoria fue muy sacrificada, pero también muy feliz, gracias al constante apoyo de su familia y amigos. “Sin este sostén tan grande, no hubiera sido posible”, afirmó.
Destacó cómo su vida profesional dio un giro positivo y significativo en poco tiempo. “Siempre para bien, creciendo y aprendiendo. Como ingenieros e ingenieras, debemos aprender e innovar constantemente. La trayectoria es un aprendizaje continuo”, subrayó.
Galichini ve el futuro con nuevos desafíos y objetivos, manteniendo una actitud perseverante y humilde. “La fortaleza de creer en uno mismo día a día es fundamental. Estoy contenta por los desafíos que vienen”, añadió.
Le dedicó un párrafo a los futuros estudiantes de la UTN, especialmente a las mujeres, Galichini los animó a estudiar Ingeniería. “Se necesitan más ingenieros e ingenieras a nivel local, provincial y nacional. La Ingeniería no es una carrera fácil, pero con sacrificio y autoconfianza, se puede lograr. Los jóvenes son la generación que impulsará el futuro de este mundo. Así que crean en ellos mismos y que sean perseverantes y todo saldrá bien”, concluyó.
Angélica Cárcamo
Otra de las recientes graduadas es Angélica Cárcamo, de 41 años, quien también se recibió de Ingeniera Electromecánica y está a punto de graduarse, además, de Ingeniera Química. “Para Ingeniería Química debo rendir el examen final el 12 de julio y luego completar la PPS, que son 200 horas de práctica profesional supervisada en un lugar donde realice una mejora. Solo entonces podré recibir mi título de Ingeniera Química”, explicó.
Angélica decidió estudiar dos carreras en paralelo. Comenzó con Ingeniería Química en 2012, y tras recibir su título de Técnica en 2016-2017, planeaba mudarse a Río Gallegos para continuar con Ingeniería Electromecánica. “Una de las profesoras me encontró en los pasillos y me dijo que no me fuera, ya que se abría Ingeniería Electromecánica en nuestra universidad. Decidí quedarme y seguir ambas carreras al mismo tiempo”, contó.
Inició sus estudios en Ingeniería tras terminar la secundaria, cursando el ingreso para Ingeniería Electrónica. “Ingresé, pero a los 20 años me asusté y no continué. Sin embargo, las ganas de estudiar y recibirme nunca desaparecieron. Estudié Profesorado, Tecnicatura en Criminalística y otras carreras, pero siempre supe que Ingeniería era lo que realmente quería”, recordó.
A lo largo de su trayecto estudiantil, Angélica contó con el apoyo incondicional de su madre, Miriam, y de sus hijos Lisandro, Nicolás, Reina y Lázaro. 2Ellos son mi sostén y la fuerza que me impulsa a darles lo mejor y ser un buen ejemplo. Podemos decir que ahora Miriam y sus cuatro hijos se recibieron de Ingeniería”, afirmó emocionada.
Con el título de Ingeniera en mano, Angélica aseguró estar lista para explorar nuevas oportunidades laborales y aplicar todo lo aprendido. “Trataré de aprovechar al máximo cada oportunidad y empezar a trabajar en lo que tanto me apasiona. Este es solo el primer paso hacia mi gran meta”, concluyó.