RIO GRANDE.- Fuentes del sector pesquero indicaron que el buque San Arawa 2, que es operado por la empresa Estremar, capturó más de 40 toneladas de merluza negra juvenil de una sola tirada el 22 de marzo último, lo que implica un serio peligro para la fauna marina.
Según los especialistas, la cantidad de merluza negra juvenil capturada excede ampliamente los límites de “pesca incidental” que puede ocurrir al emplear la técnica de arrastre, lo que demostraría que hubo una intencionalidad manifiesta de capturar esta especie protegida. Una situación similar a la que vive por estos días la compañía Prodesur.
Los patrones de pesca del San Arawa 2, los noruegos Ingvar Johannesson e Idar Rekkedal, son apuntados como los máximos responsables en el marco de la investigación por este caso de pesca ilegal de merluza juvenil.
Merluza negra en Tierra del Fuego
La cuota de merluza negra en Argentina está monopolizada por tres grandes empresas: Argenova, Estremar y Pesantar, que consiguieron que el Consejo Federal Pesquero (CFP) emitiera un acta en 2019 que dejó afuera a la compañía Prodesur y “habilitó” oficialmente la cartelización de la actividad, que arroja ganancias anuales por U$S 150 millones.
El 5 de marzo de 2021 el CFP renovó automáticamente las autorizaciones de captura de merluza negra para las mismas tres empresas hasta 2025 inclusive.
Previamente, Prodesur contaba con cuota para la pesca de merluza negra, pero en 2019 la compañía San Arawa se la apropió a través de una maniobra fraudulenta que fue denunciada ante la Justicia.
La denuncia de Prodesur a Estremar por “fraude”
Según declaró el presidente de Prodesur, Liuz Chijian, nacido en China y nacionalizado argentino hace más de 30 años, San Arawa se transfirió gratuitamente el 2,7% de la cuota de merluza negra que le correspondía a Prodesur, mediante un documento firmado bajo amenaza por un hombre que se hizo pasar por el presidente de la compañía.
Zhijiang solicitó la nulidad de la transferencia de la cuota a San Arawa “por violación del derecho de propiedad de Prodesur”, ya que “fue un acto absolutamente fraudulento, que se funda en las actuaciones de una persona ‘figurativa’ que suscribió una cesión de derechos sin contar con la debida legitimación”.
El buque de la empresa Estremar dejó de operar el año pasado, por lo que la compañía se vio obligada a “absorber” a San Arawa para poder utilizar su embarcación. De esta manera, se apropió también de su cuota de merluza negra, superando ampliamente el límite permitido.
El pedido del sector al Consejo Federal Pesquero
Ante la sucesión de maniobras fraudulentas y denuncias judiciales, referentes del sector le pidieron al CFP que convoque a una reunión entre los principales actores de la industria, ya que no lo ha hecho desde el cambio de gobierno, a pesar del pedido del gobernador fueguino Gustavo Melella para volver a discutir las cuotas de captura permisibles.
Además, solicitaron que intime a todos los buques pesqueros que poseen la cuota de merluza negra a que retornen a puerto de inmediato para que puedan ser evaluados e investigados, con el objetivo de evitar que se agrave el daño al medio ambiente.
Esperan que haya una dura sanción
Terminada la descarga del buque Tai An, que fue seguida por una comisión fiscalizadora de las empresas con cuota de captura, esta semana debería conocerse más información del sumario iniciado. La denuncia original incluye referencias sobre contactos comerciales con un importante trader de EE.UU.
Las empresas denunciantes y el sector pesquero en general esperan que esta semana se conozca el sumario de la Subsecretaría de Pesca de la Nación en el caso del buque Tai An, de la empresa Prodesur SA, que según una denuncia de Argenova, Estremar y Pesantar, las 3 pesqueras argentinas con cuota de captura de Merluza Negra, y un informe del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (Inidep), pescó ilícitamente 175 toneladas de la especie, violando la Ley Federal de Pesca y la normativa del sector.
El viernes, en el puerto de Ushuaia, se terminó la descarga completa del enorme buque pesquero, de 102 metros de eslora, ante una comisión de fiscalización integrada por representantes de las empresas afectadas.
La merluza negra es la especie más valiosa del Mar Argentino y Prodesur y el buque Tai An son propiedad de Liu Zhijiang, un empresario de origen chino radicado hace 30 años en Ushuaia, donde hizo fortuna como cambista, tiene numerosas propiedades, una colección de obras de arte que incluiría una pintura original del pintor neerlandés Rembrandt van Rijn y una red de contactos e influencia política que llega al gobernador provincial, Gustavo Melella.
Según Zhijiang dijo al diario Clarín, a principios de febrero Melella habría pedido que se asignara al Tai An una “reserva” de la cuota anual de pesca de la merluza negra.
La “cuota máxima permisible de captura” de la especie, que asigna anualmente el Consejo Federal Pesquero (CFP) ha sido en los últimos 5 años de 3.700 toneladas anuales y se reparte entre Argenova, Estremar y Pesantar. El CFP hace una “reserva” de cuota (usualmente, 20% de la misma) que administra a lo largo de cada zafra para evitar que variables como la “pesca incidental” o cuestiones biológicas y ambientales afecten la pesquería de una especie muy protegida y de delicado ciclo reproductivo.
La gestión de Melella no tenía destino, porque el CFP aún no se constituyó bajo el gobierno de Javier Milei y porque además la “reserva” debe asignarse entre las empresas con “Cuota Individual Transferible de Captura” (CITC), justamente las denunciantes del accionar del Tai An.