Bomberos Voluntarios de Margen Sur celebraron un nuevo aniversario

El evento se realizó en el cuartel de este destacamento ubicado en la intersección de las calles Wonska y Orosky y contó con la presencia del secretario de Obras y Servicios Públicos del municipio, Julio Bogado, del presidente de la Asociación de Bomberos Voluntarios, Pascual Lombardo; el jefe del Cuerpo de Bomberos, Oficial Auxiliar Carlos Cárdenas, además de integrantes de la comisión directiva y del cuerpo activo, vecinos y amigos de la institución de bien público.

La bandera de ceremonias y el estandarte de la institución de Bomberos engalanaron con su presencia el acto. Asimismo, todos los integrantes de la dotación del Destacamento estuvieron formados en la fría mañana.

Durante la ceremonia, hicieron uso de la palabra el Comandante Juan Carlos De León y el Encargado del Destacamento, Fernando Peinepín.

De León, quien tuviera como destino desde su fundación este destacamento, recordó que un día como hoy de 1992 se dejaba oficialmente inaugurada esta dependencia, pero la historia comenzó unos años antes cuando el barrio Austral comenzaba a perfilarse.

“Para llegar a esta inauguración, las autoridades (de la Asociación) de aquella época, ante el justo reclamo de los vecinos de los recién nacidos barrios de lo que hoy es la Margen Sur, decidieron gestionar ante las autoridades políticas del momento, un terreno donde pudiese funcionar un pequeño destacamento que permitiera minimizar de algún modo la cantidad de siniestros que se producían por la precariedad de las construcciones y la falta de servicios tales como gas, luz, y en algunos casos, hasta agua, motivos que obligaban a los pobladores de estos barrios a calefaccionarse con leña o solidariamente extender un cable de vecino a vecino para que tuvieran luz, lo que obviamente maximizaba el peligro de incendios”.

En este punto se detuvo para recordar un hecho que asoló en esos tiempos y era el accionar de un pirómano: “Antes de que en este sector hubiesen bomberos, no me puedo olvidar y quiero destacar la voluntad, la solidaridad y el compromiso de todos los vecinos de todos los barrios de aquella época que ante la acción vandálica de un enajenado que noche a noche incendiaba las humildes casas de los que con mucho sacrificio intentaban levantar y hacer un hogar para sí y sus familias”.

Agregó que “es sí que organizados, los vecinos decidieron patrullar en grupos de a dos o tres las calles de la incipiente población, tratando de evitar que se produjeran más daños de los que ya se habían ocasionado y este hecho, entre otros que ya mencioné, fue uno de los motivos que llevó a la creación de este destacamento, que en un principio funcionó en casas particulares de algunos vecinos que se dieron cuenta de la gravedad de la situación y decidida y voluntariamente prestaron sus hogares para que por fin los barrios contaran con al menos una pequeña dotación de bomberos”.

Observó el Comandante que el único cuartel de bomberos estaba en el centro de la ciudad y llevaba mucho tiempo llegar a los siniestros en estos barrios, “dado que no había accesos ni calles asfaltadas, y ni hablar en la época invernal cuando los tiempos de arribo se duplicaban”.

Reseñó que “meses después y luego de las gestiones de las autoridades de la Asociación, se consigue el terreno y con mucho sacrificio y la colaboración del Cuerpo Activo, se levanta un pequeño galpón donde poder guardar una unidad Unimog 4x4 con 960 litros de agua y un equipamiento mínimo de lucha contra incendio que fue destacada por el Cuartel Central a la zona, además de una precaria casillita en donde el personal hacía su guardia, no exentos del frío y en muchas ocasiones, del congelamiento de la propia unidad”.

Añadió que “el 24 de diciembre de 1991 (en plena Nochebuena), una pequeña dotación enviada por el Cuartel Central realiza la primer guardia y un día como hoy de 1992 se lleva a cabo la inauguración oficial de este destacamento que se lo denominó ‘Delta Uno’ pero que ya contaba con una dotación de 16 efectivos no mayores de 25 años, excepto uno, quien les habla, que tenía algunos años más. Lo más importante es que eran todos del barrio, todos hijos de vecinos, todos sabiendo de la responsabilidad que cargaban sobre sus hombros y que asumieron, más allá de muchos malos momentos, carencias y más de una crítica infundada; pero jamás doblegaron su voluntad y sacrificio demostrando como dice el lema de los Bomberos Voluntarios argentinos: ‘Abnegación y Valor’. Hoy los tiempos han cambiado; hoy el barrio cuenta con un eficiente equipo de Bomberos apoyado por unidad y elementos de lucha contra incendio y accidentes vehiculares, de última generación y en contraposición a aquel pequeño galpón del principio, hoy hay un moderno edificio de dos plantas con cómodas instalaciones que facilitan las largas guardias que el personal debe realizar, y que fue construido con visión de futuro por la Comisión Directiva que lleva adelante los actuales destinos de la institución”.

Un párrafo muy emotivo le dedicó a su paso por este destacamento: “Quise hacer un pequeño un pequeñísimo racconto de la historia de este destacamento –contar la historia sería demasiado largo para un acto-; de cualquier manera quiero que sepan que para mí fue un honor haber pertenecido a este destacamento donde comencé mi carrera junto a muchos que ya no pertenecen a la institución, pero que están y estarán presentes por siempre en mi recuerdo y otros que todavía integran el Cuerpo Activo y continúan dando todo, como en aquellos tiempos, al servicio de la comunidad. Solo me resta dar las gracias a todos los vecinos, a los amigos que tengo por aquí, pero en especial, a mis camaradas y ahora Feliz cumpleaños Destacamento 1”, saludó.

Peinepín: “Siempre habrá bomberos donde se los llame”

En tanto el Encargado del Destacamento, Fernando Peinepín, pronunció palabras en similar tenor y agregó que desde aquel 16 de julio “comenzamos nuestra labor hasta el día de hoy” y que “continúa sin interrupción alguna”.

“Ya sea de día, de noche, bajo cualquier clima y en cualquier zona, siempre habrá bomberos voluntarios donde se los llame”, declamó.

El encargado observó que los nuevos tiempos exigen también nuevas preparaciones y nuevas capacitaciones al personal, como así también nuevo equipamiento tecnológico y estrategias.

“Con la promesa de continuar nuestra labor y de continuar mejorándonos día a día para prestar un mejor servicio, agradecemos también la colaboración de nuestros vecinos del barrio, que es por y para quien existimos, y es por y por quienes seguiremos creciendo como institución”, finalizó.

Luego de estas palabras, se dio por concluido el acto y los presentes compartieron luego una infusión caliente y la tradicional torta de cumpleaños.