De la firma del convenio participaron el ministro de Trabajo, Jorge Triaca y directivos de la Federación de Empleados de Comercio y Servicios (FAECyS) y Carrefour Argentina, luego de diez reuniones entre la compañía y el gremio que encabeza Armando Cavalieri.
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Fuentes de la cartera laboral aseguraron que la empresa se comprometió a no realizar despidos, ni cerrar sucursales y que sólo aquellos empleados que lo requieran podrán acceder a los retiros voluntarios, con indemnizaciones al 150%.
El acuerdo incluye tres puntos principales y en el primero de ellos Carrefour se "compromete a preservar los puestos de trabajo y solamente se realizarán acuerdos voluntarios con aquellos trabajadores que así lo deseen", informó la cartera laboral en un comunicado.
La versión difundida por Trabajo prevé cursos de capacitación del Ministerio de Trabajo para los trabajadores que accedan a los acuerdos voluntarios y "beneficios adicionales" en los casos de personas embarazadas, personas de mayor antigüedad, matrimonios.
En las actas que se filtraron, el acuerdo establece un recorte salarial, ya que se fija un tope a los adicionales de hasta $3.480 para calcular el aumento salarial del 2018. Asimismo, las paritarias próximas no tendrán en cuenta como base de cálculo todos los adicionales.
Tal como lo adelantó este medio, la empresa además dejará de pagar el 50% de las contribuciones previsionales patronales sobre la totalidad de la plantilla de empleados, y tendrá la autoridad para cerrar locales, con el sólo hecho de informarlo 30 días antes tanto al gremio como a la cartera laboral.
El acuerdo enfureció a los delegados liderados por el disidente Ramón Muerza, que tras anoticiarse anunciaron medidas de fuerza para este sábado a partir de las 8 de la mañana en todos los locales de la cadena. Desde ese sector afirman que las indemnizaciones serán financiadas con la rebaja salarial.
"Pagan las indemnizaciones con nuestros sueldos. Cavalieri nos entregó, no se lo vamos a permitir y desconocemos absolutamente este acuerdo", dijo el delegado de la sucursal Warnes Mario Amado.
La multinacional se había presentado al procedimiento preventivo de crisis alegando una fuerte caída en las ventas, lo que puso en riesgo la continuidad laboral de unos 19 mil empleados que tiene en el país.
La firma del convenio se realizó en la quinta presidencial de Olivos y participaron el CEO de la filial argentina de la compañía, Rami Beitieh, el secretario general del gremio, Armando Cavallieri, y el ministro de Trabajo, Jorge Triaca.
También estuvieron el viceministro, Horacio Pitrau, el director nacional de Relaciones y Regulaciones del Trabajo, Adolfo Saglio Zamudio, la directora nacional de Asociaciones Sindicales, Karina Palacios y los abogados del gremio Alberto Tomassone y Jorge Barbieri.
Fuente: Iprofesional
