Ante la presión social, Gobierno no pagará el aumento a la clase política

La Gobernadora Fabiana Ríos suspenderá por decreto la aplicación del aumento salarial sancionado por la Legislatura provincial hasta tanto haya disponibilidad económica en el presupuesto del Poder Ejecutivo para absorber el incremento y hacer extensiva una mejora salarial a los empleados de la Administración Pública, tal como lo establece la Constitución Provincial.

La medida será implementada una vez que el proyecto de Ley insistido el jueves por la Legislatura Provincial ingrese formalmente a la sede gubernamental, lo que hasta este lunes había ocurrido.

Ríos enviará a su vez al Parlamento un proyecto de Ley estableciendo “con toda claridad” que los funcionarios políticos “no percibirán los ítems ‘título’ y ‘antigüedad’”, como se deslizó luego de que la Legislatura, en el proyecto insistido, derogara la Ley 277, vigente desde diciembre de 1995, en cuyo artículo 6º dispone que “a partir de la promulgación de la presente, ningún funcionario alcanzado por esta Ley percibirá los adicionales por antigüedad y título”.

La suspensión del aumento que aplicará el Gobierno será a los fines de la percepción por parte de los funcionarios y no de la fijación del salario. El decreto deja también sin efecto la retroactividad del incremento.

La Legislatura definió con la sanción de la norma votada el jueves que la base del sueldo de la Gobernadora sea siete veces la remuneración de un agente de la categoría 10 de la planta permanente del Poder Legislativo, y no del Ejecutivo como rige en la actualidad.

Esta iniciativa había sido sancionada por los legisladores en diciembre de 2010, pero la Gobernadora la vetó en todos sus términos apenas dos días después con la firma del Decreto 3157/10. El asunto permaneció en comisión hasta que los legisladores decidieron tratarlo en insistencia el jueves pasado.

No aclare que oscurece

En un intento por frenar la crispación social que la medida ya había generado, y más aún en la representación sindical que recibió constantes negativas como respuesta a cada pedido de mejora salarial, la gobernadora intentó explicar a su modo la decisión de la Legislatura y sus dichos generaron aún más incomodidad en la gente.

En declaraciones radiales a varios medios provinciales, Ríos aclaró que “los legisladores no votaron un aumento, sino la manera en la que se fija la dieta de los funcionarios políticos”. Además, intentó justificar que la modificación de ese esquema genera un incremento salarial del “11 por ciento” el que, “aún siendo muy inferior al que promocionan por los medios funcionarios de la oposición, no será percibido por los funcionarios del Poder Ejecutivo en las actuales circunstancias económicas”.