JUJUY.- Tras la aprobación y juramento de la reforma parcial de la Carta Magna de Jujuy durante la jornada de este martes, personas que se manifestaban en contra de los cambios y que se encoentraban en los alrededores de la Casa de Piedra, en las calles de San Salvador, derribaron las vallas perimetrales de la Legislatura provincial y comenzaron a arrojar piedras contra la policía, que respondió con gases lacrimógenos y balas de goma.
Los incidentes ocurrieron alrededor del mediodía y los destrozos se pueden observar en los vidrios rotos de los negocios de la capital jujeña, en los automóviles estacionados cerca de la Legislatura y en el propio edificio parlamentario, que recibió impactos de piedras por parte de algunos manifestantes.
La marcha, que había congregado hoy a varios sectores de la sociedad en la capital jujeña con destino a la Legislatura provincial para protestar contra la reforma parcial de la Constitución provincial, comenzó durante la mañana.
Mientras los diferentes grupos se manifestaban fuera de la Casa de Piedra, en su interior se discutía el nuevo texto para su aprobación y juramento. El enfrentamiento policial se produjo poco después de las 11:00 a unos 200 metros del parlamento provincial, donde el gobernador Gerardo Morales encabezaba la sesión y se disponían a jurar la reforma de la carta magna.
Inicialmente, el juramento estaba programado para esta tarde a las 18:30 en el Teatro Mitre de la Ciudad de San Salvador de Jujuy, pero se adelantó para esta mañana, en medio de un clima de protestas en rutas y calles de todo el territorio provincial.
El inicio de los disturbios
Pasadas las 11:30 y con el avance de los grupos que intentaban ingresar a la Legislatura, los efectivos de infantería de la policía jujeña se enfrentaron a los manifestantes, utilizando balas de goma y gases lacrimógenos.
Mientras tanto, algunos manifestantes incendiaron algunas instalaciones de la Legislatura. El gobernador y otros funcionarios se retiraron debido a los disturbios después de lograr la aprobación de los cambios.
A medida que los enfrentamientos continuaban en los alrededores de la Legislatura provincial, la situación se volvía cada vez más tensa. Los manifestantes mostraban su descontento con la reforma parcial de la Carta Magna, considerando que vulneraba derechos y libertades fundamentales.
La policía intentaba contener la situación y dispersar a los manifestantes utilizando medidas de fuerza, mientras estos respondían con consignas y piedras. El caos y la violencia se apoderaron de las calles de San Salvador, generando un clima de incertidumbre y preocupación entre los residentes.
En medio de los disturbios, se produjeron destrozos en diversos establecimientos comerciales, cuyos vidrios fueron quebrados por los impactos de piedras lanzadas durante los enfrentamientos. Además, varios automóviles estacionados en las inmediaciones resultaron dañados, generando pérdidas materiales significativas.
La marcha, que había comenzado pacíficamente, se convirtió en un escenario de enfrentamientos y vandalismo. Los manifestantes expresaban su descontento y frustración, sintiéndose marginados y excluidos del proceso de reforma constitucional.
Decisión gubernamental
Las autoridades provinciales, encabezadas por el gobernador Gerardo Morales, decidieron adelantar el juramento de la reforma para evitar mayores altercados y mantener la seguridad en la zona. Sin embargo, esta medida no logró evitar los disturbios y la escalada de violencia.
Tras lograr la aprobación de los cambios, el gobernador y otros funcionarios se vieron obligados a abandonar el lugar debido a la intensidad de los enfrentamientos. Los destrozos en la Legislatura provincial evidenciaban el nivel de violencia alcanzado durante las protestas.
La situación en Jujuy se mantiene tensa y las autoridades buscan restablecer el orden y la tranquilidad en la capital provincial. Mientras tanto, los grupos opositores a la reforma constitucional continúan manifestándose en diferentes puntos de la ciudad, exigiendo que se revea la decisión y se respeten sus derechos.
Las consecuencias de estos disturbios y la aprobación de la reforma parcial de la Carta Magna de Jujuy tendrán un impacto significativo en la sociedad y en el clima político de la provincia. Es fundamental que las autoridades y los manifestantes encuentren vías de diálogo y negociación para resolver las diferencias y reconstruir la paz social en la región.
