egún un informe elaborado en 2024 por UNICEF, el 68% de las madres no la reciben regularmente. Los especialistas aseguran que ese número creció en los últimos meses. En tanto, otra cifra impactante tiene que ver con que el 56% de las madres directamente no reciben la manutención cuando el padre no convive con sus hijos. Es decir, más de la mitad de las mujeres crían a sus hijos sin ese dinero.
“¿Qué pueden hacer las mujeres? ¿Qué ocurre cuando un padre deja de pagar? ¿Qué pasa cuando los nenes cumplen la mayoría de edad? ¿Qué hacer cuando el progenitor se borró?”. En un informe especial de Todo Noticias, conversaron con especialistas, abogados y organizaciones que trabajan en la temática para responder algunas preguntas clave.
MÁS DE LA MITAD DE LAS MUJERES NO RECIBE LA CUOTA ALIMENTARIA
Del escaso número de mujeres que sí la perciben, un 24% considera que el monto no es suficiente para cubrir los gastos de sus hijos e hijas.
Entre aquellas mujeres que no reciben este pago, el 60% aseguró que el progenitor tampoco se hace cargo de otros gastos que no están incluidos dentro de la misma.
“Algo que surge de estos estudios es que la forma de violencia económica no se da forma aislada, hay una configuración de otras formas de violencia. Esto tiene un impacto en el día a día, que cambia”, explicó Agustina Correa, integrante del área jurídica del Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA).
Los motivos que presentan quienes no pagan la cuota alimentaria son variados, pero hay dos que se imponen por sobre los demás.
De acuerdo al informe elaborado por UNICEF, el 61% de los hombres no paga la cuota alimentaria por mala relación con la madre y/o con los hijos e hijas.
La otra causa es una muy escuchada por las mujeres que crían solas a sus hijos. El 24% dice que no paga por falta de trabajo o por tener ingresos insuficientes.
Ana Rosenfeld, reconocida abogada del país, señaló que este último caso es uno de los principales conflictos para las madres: “El gran problema es cuando la persona no tiene solvencia o un trabajo fijo o una cuenta bancaria con movimiento que se pueda embargar”.
“Este tipo de violencia, económica o patrimonial, no repercute solamente en la mujer. Es una forma de violencia que repercute en el día a día en la infancia que está tratando de proteger“, explicó Correa.
Esto se da en un contexto en el que el 14% de los hogares en Argentina son monoparentales o monomarentales y el 80,1% de esos hogares están liderados por una mujer.
La falta de pago de las cuotas alimentarias afecta duramente a las mujeres en un contexto económico complejo: 7 de cada 10 hogares monomarentales son pobres y 3 de cada 10 son indigentes.
QUÉ DICE LA JUSTICIA SOBRE LAS CUOTAS ALIMENTARIAS
La ley nacional establece que cada uno de los progenitores está obligado a mantener a sus hijos hasta los 21 años o hasta los 25 en caso de que estudie. Si los padres se separan, quien no conviva con los nenes debe pagar una cuota adecuada para afrontar los gastos.
Los conflictos comienzan cuando, en la gran mayoría de casos, el padre deja de pagar la cuota alimentaria o directamente ni siquiera empieza a pagarla. El primer paso es consultar a un abogado sobre los pasos a seguir y avanzar o en una instancia de mediación o en un juicio.
Según un informe del Ministerio de Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la Provincia de Buenos Aires, más del 65% de las mujeres no conoce centros de atención legal ni sabe a qué institución recurrir.
Y más grave aún es que el 45,9% de las mujeres desconoce el alcance de la obligación alimentaria. Es decir, casi la mitad de las mujeres desconocen qué pueden exigir y a qué están obligados los padres.
“7 DE CADA 10 HOGARES MONOPARENTALES SON POBRES Y 3 DE CADA 10 SON INDIGENTES”
Otro de los inconvenientes aparece cuando el padre plantea que no tiene solvencia para pagar la manutención. En esos casos, hay dos opciones: avanzar en un juicio contra la familia paterna o ir contra su propiedad.
“Si el padre no puede pagar, siempre los que siguen en la línea de obligación son los abuelos”, planteó Agustina Correa, en sintonía con Rosenfeld.
Esta opción también se impone cuando el hombre decide “desaparecer” y no pagar nunca más. O cuando caen presos: “Muchos antes de entrar a la cárcel se insolventan y ponen las cosas a nombre de su familia”, planteó la letrada.
Aunque a fines de marzo, la Justicia de Córdoba dictó un fallo inédito en el que obligó a una mujer pagar la cuota alimentaria que su esposo le adeudaba a su ex. “Son medidas creativas que favorecen para que los nenes puedan mantener su nivel de vida”, planteó Agustina Correa.
La abogada explicó la segunda alternativa: “Muchas veces empecé a embargar la cuota alimentaria en ladrillos. A medida que dejan de pagar te vas quedando con un porcentaje de la casa”.
¿SON EFECTIVAS LAS SANCIONES PARA LOS DEUDORES?
Durante muchos años, una de las medidas más habituales utilizada por la Justicia argentina fue suspenderle la licencia de conducir a los deudores alimentarios.
En los últimos meses se incorporaron otras sanciones, como la suspensión de las redes sociales o la prohibición a los estadios de la Ciudad de Buenos Aires a quienes figuren inscriptos en el Registro de Deudores Alimentarios Morosos de CABA.
Rosenfeld planteó que este tipo de medidas no logran tener la eficacia que debería: “Anotarlos en un registro de deudores alimentarios morosos les hace gracia. La prohibición de salir del país les puede joder pero tampoco es coercitivo”.
“La gente que tiene prohibición de salida del país se hace unos viajes maravillosos dentro del país. Hay muchos padres que siguen viajando, se alquilan una casa maravillosa en el sur del país y no pagan la cuota alimentaria”, señaló Rosenfeld.
En ese contexto, la abogada señaló que la única manera de terminar con este conflicto es la cárcel. “Tiene que haber cinco o diez días de detención. Sería algo que haría escarmentar al señor que no paga la manutención a propósito”, destacó la abogada.