TIERRA DEL FUEGO.- La Armada Argentina se encuentra en una búsqueda activa para recuperar su capacidad submarina, tras casi seis años sin contar con submarinos operativos. Con el objetivo de fortalecer su flota y entrenar a su personal, se está evaluando la opción de incorporar uno de los submarinos clase U-209-1400 "Tupi" que actualmente están siendo retirados de servicio por la Marina de Brasil, en favor de los modernos submarinos clase Riachuelo de producción brasileña.
Esta iniciativa cobró fuerza durante el reciente Ejercicio Bilateral "Fraterno", que se llevó a cabo entre finales de agosto y principios de septiembre de este año. Durante este ejercicio, personal de la Armada Argentina fue desplegado a bordo del submarino "Tikuna" (S-34) de la Marina de Brasil, donde se realizaron diversas maniobras de guerra antisubmarina junto con unidades de ambas armadas. La Marina de Brasil también desplegó las fragatas clase Niteroi "União" e "Independência", mientras que por parte de la Armada Argentina participó el Destructor "Heroína".
Los submarinos clase "Tupi" representan una evolución de la clase Tipo 209/1200, que incluye al ARA "Salta" (S-31), utilizado actualmente como submarino de adiestramiento en la Base Naval Mar del Plata (BNMP), y al ARA "San Luis" (S-32), que fue retirado de servicio en 1997 y tuvo un destacado papel durante la guerra de Malvinas.
La necesidad de revitalizar la capacidad submarina argentina se ve agravada por la historia frustrada del programa TR 1700/1400, que sufrió debido al desinterés político y las dificultades presupuestarias. Además, la situación actual del "Salta" y del "Santa Cruz", que entró en un proceso de modernización de media vida interrumpido, subraya la urgencia de abordar esta cuestión para garantizar una capacidad estratégica adecuada a la geografía argentina.
Aunque aún no se ha especificado cómo se llevará a cabo la posible incorporación de uno de los submarinos "Tupi", se mencionan dos opciones: a través de un contrato de leasing o mediante una venta tradicional. Paralelamente, el Ministerio de Defensa ha expresado interés en los submarinos "Riachuelo", derivados de la clase Scorpene francesa y construidos en el Arsenal Naval Rio de Janeiro como parte del programa PROSUB. Hasta la fecha, el Riachuelo (S-40) está operativo, el Humaitá (S-41) se encuentra en proceso de alistamiento, y los submarinos Tonelero (S-42) y Angostura (S-43) están en diferentes etapas de construcción.
La Armada Argentina sigue trabajando arduamente para fortalecer su flota submarina y garantizar la seguridad marítima en la región, evaluando cuidadosamente las opciones disponibles y considerando la importancia estratégica de contar con submarinos operativos.
