BUENOS AIRES.- Las amas de casa en la Argentina pueden jubilarse, aun sin tener los 30 años de aportes que exige la ley local. Es como consecuencia de una iniciativa creada en 2005, a la que por entonces se la conoció como Plan de Inclusión Previsional (PIP), y nació para que trabajadores en negro completaran los años de aportes.
Sin embargo, casi de forma inmediata aquel programa del gobierno de Néstor Kirchner se convirtió en la jubilación para amas de casa porque justamente permitió el reconocimiento al trabajo de muchas mujeres y su inserción en el sistema previsional por las labores domésticas que realizan como miembros de una familia.
El PIP no tuvo género ni un direccionamiento concreto, pero habilitó a que la mayoría de sus beneficiarias fueran amas de casa trabajadoras que nunca antes habían estado en los planes de la Seguridad Social.
A su vez, estableció un marco regulatorio para muchas mujeres en edad para jubilarse que sin embargo acumulaban años de trabajo informal (en negro) o de tareas inestables y discontinuas que no les permitían cumplir con los requisitos para acceder al beneficio del sector pasivo.
Apunta a mujeres cuyos años de aportes sean insuficientes para tramitar una jubilación ordinaria. Se las incluye en una moratoria que permite cancelar los años no aportados al Estado a través de una financiación accesible, y así recibir un haber mensual equivalente a la jubilación mínima.
Desde entonces, dicha moratoria para la jubilación por ama de casa fue prorrogada varias veces. Así, la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES) aplicó en 2019 una ampliación en la ventana de este beneficio-aun con algunas restricciones- hasta el 23 de julio de 2022.
Requisitos para acceder a la jubilación por ama de casa
Las interesadas deben tener 60 años o cumplirlos hasta el 23 de julio de 2022, y tampoco contar con los 30 años de aportes formales requeridos para acceder a una jubilación ordinaria.
No podrán requerirla aquellas que reciban algún beneficio del Estado, como planes sociales, pensión no contributiva ni jubilación nacional, provincial o municipal. Sí pueden optar por renunciar al que tienen vigente para acceder a la jubilación por ama de casa.
En cambio pueden solicitarla las pensionadas por viudez, pese a que ya reciben un pago mensual del Estado), Sin embargo, ellas tienen que cancelar la moratoria de contado.
Ya no tiene el carácter de universalidad que le confirieron en sus orígenes, cuando la jubilación por ama de casa alcanzaba a todas las mujeres que habían llegado a los 60 años. Ahora, la ANSES realiza una “evaluación socioeconómica”, ya que se reserva para mujeres que se encuentran en situación de mayor vulnerabilidad. En su examen, la ANSES cruza datos con la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), en los que se analizan ingresos brutos, inmuebles, automóviles, gastos y consumos con tarjeta de crédito y débito del año previo a la presentación.
No se permite incluir en la moratoria los 30 años de aportes requeridos, sino que deben tener al menos cuatro años de ingresos a la caja hasta el 31 de Diciembre de 2003. Por ende, no se puede acceder a la jubilación por ama de casa si jamás se aportó a la Seguridad Social.
Cómo tramitar la jubilación de amas de casa
La tramitación puede comenzar en forma virtual. El primer paso es obtener en www.anses.gob.ar la clave de seguridad social nivel 2 que permite hacer algunas gestiones y consultas. Además, en la sección MI ANSES, se corroboran que estén correctos los datos personales que tiene la base de datos del organismo.Para acceder a la Clave nivel 3 -que se requerirá en otra instancia del trámite de solicitud de la jubilación por ama de casa-, hay que solicitar un turno en la agencia de ANSES más cercana al domicilio y concurrir con el DNI y fotocopia del mismo.
También en MI ANSES se puede verificar el historial como contribuyente previsional. Si los datos no estuvieran volcados en el sistema, la interesada tiene que contar con la documentación que acredite dichos aportes. Se aconseja que un contador se encargue de volcar la liquidación en el Sistema de Información para Contribuyentes Autónomos y Monotributistas (SICAM) para presentar en ANSES, ya que no permite errores.
Por cualquier consulta, la ANSES pone a disposición la línea telefónica 130 o también tiene canales de comunicación online en su sitio, en el que también es posible sacar un turno para una entrevista personal en una agencia del organismo.