BUENOS AIRES.- El nuevo billete de $20.000, el de mayor denominación en la historia reciente de Argentina, será lanzado a fines de octubre y comenzará a circular en los primeros días de noviembre, según confirmaron fuentes del Banco Central. Este billete, que llevará la imagen de Juan Bautista Alberdi, se sumará al de $10.000, emitido en mayo de este año con las figuras de Manuel Belgrano y María Remedios del Valle.
El Banco Central ha decidido emitir 230 millones de unidades del nuevo billete, que serán producidas en China. Sin embargo, la elevada inflación que ha azotado al país en los últimos años ya ha impactado en su valor. Actualmente, el billete de $10.000, que está en circulación desde mayo, representa solo $7,22 al tipo de cambio libre, y se espera que el nuevo billete de $20.000 equivalga a apenas $14,44.
A pesar de que la nueva emisión ayudará a facilitar las operaciones diarias en comercios y bancos, su poder de compra sigue siendo limitado. Según Andrés Méndez, director de AMF Economía, "el billete de $20.000 representará unos $16.675 cuando comience a emitirse a fines de octubre". Sin embargo, si se cumplen los pronósticos inflacionarios más pesimistas, su valor podría reducirse a $16.160.
El Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) publicado en agosto por el Banco Central indica que los 42 economistas encuestados esperan que la inflación mensual sea inferior al 4% en los próximos meses. No obstante, esta moderación en el ritmo inflacionario podría no ser suficiente para evitar que el nuevo billete pierda hasta un 20% de su poder adquisitivo en el momento de su lanzamiento.
En este contexto, Lucio Garay Méndez, economista de Eco Go, subraya que "el billete debería ser de $24.500 para fines de octubre para equivaler a los $20.000 anunciados en enero". Esto refleja la acelerada pérdida de valor que ha experimentado la moneda debido a la inflación, lo que plantea interrogantes sobre la efectividad de la nueva emisión para resolver los problemas cotidianos de los argentinos en términos de efectivo.
Con la salida del nuevo billete de $20.000, el Banco Central busca aliviar las dificultades generadas por la inflación en las transacciones diarias, aunque el desafío de mantener el poder adquisitivo de la moneda sigue siendo una preocupación central para los economistas y la población en general.