BUENOS AIRES.- El ministerio de Salud de la Nación confirmó hoy a LA NACION que se detectó el primer caso sospechoso de viruela del mono en la Argentina. “Se encuentra bajo investigación”, precisaron.
Según indicaron desde la cartera que conduce Carla Vizzotti se trata de un hombre que vive en la ciudad de Buenos Aires y se encuentra aislado. Fuentes del ministerio señalaron que presenta “buen estado general” y está “recibiendo tratamiento sintomático”.
El ministerio de Salud de la Nación indicó que para realizar la investigación se tomó una muestra de esta persona para diagnóstico etiológico, las cuales están bajo análisis en el Laboratorio Nacional de Referencia INEI-ANLIS Dr. Carlos G. Malbrán.
“Mientras se aguardan los resultados se conformó una mesa de trabajo con la provincia de Buenos Aires y Ciudad Autónoma de Buenos Aires para coordinar las acciones clínicas, diagnósticas y epidemiológicas con el fin de confirmar o descartar el caso, dar adecuada atención clínica e implementar todas las medidas de control de foco para evitar una posible transmisión”, precisaron.
Afecciones cutáneas que se pueden presentar como consecuencia con la viruela del mono
A raíz de la notificación a nivel internacional de los primeros casos de la viruela de mono en países no endémicos, el Gobierno nacional conformó un equipo de trabajo “con el objetivo iniciar la vigilancia del nuevo evento y generar las recomendaciones específicas para los equipos de salud y la población”.
Hasta ayer, la Organización Mundial de la Salud (OMS) reportó 28 casos confirmados por laboratorio y 12 casos sospechosos de viruela símica en 12 países no endémicos (Australia, Bélgica, Canadá, Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, Portugal, España, Suecia, Reino Unido y Estados Unidos).
“En estos casos aún no se ha confirmado antecedente o nexo con áreas endémicas”, advirtió la cartera que conduce Vizzotti a través de un comunicado, y precisó: “El alcance de la transmisión comunitaria no está claro aún en esta etapa y, por tanto, existe la posibilidad de identificar más casos. Sin embargo cabe mencionar que se considera que el virus de la viruela símica tiene una transmisibilidad moderada entre humanos”.
Recomendaciones para la población
Ante el hallazgo de un caso sospechoso, el Gobierno nacional emitió una serie de recomendaciones para la población. Qué se debe tener en cuenta:
“Toda persona que presente síntomas compatibles (en especial erupciones) y antecedentes de viaje a zonas donde está habiendo casos y/o supone alguna exposición de riesgo con casos sospechosos, probables o confirmados, deberá tomar medidas de aislamiento social (no concurrir a escuela, trabajo, eventos sociales, etc), implementar medidas de protección respiratoria (uso adecuado de barbijo, ambientes ventilados y distancia de las otras personas) y realizar la consulta con el sistema de salud de forma inmediata”.
El contacto cercano con personas infectadas es el factor de riesgo más importante para la infección por el virus.
Se considera exposición a un caso si:
Ha presentado exposición sin protección respiratoria (particularmente relevante para los trabajadores de la salud)
Contacto físico directo, incluido el contacto sexual
Contacto con materiales contaminados como ropa o ropa de cama.
Si una persona ha tenido contacto de riesgo con un caso sospechoso o confirmado de viruela símica en el período infeccioso -comprendido entre el inicio de síntomas del caso hasta que hayan caído todas las costras de las lesiones cutáneas deberá guardar los siguientes cuidados:
Control su temperatura dos veces al día
Mientras permanezca asintomática, puede continuar con las actividades diarias de rutina, pero debe permanecer cerca de su casa mientras dure la vigilancia
Se realizará seguimiento clínico-sanitario estricto durante 21 días desde el último contacto con el caso
Si la persona desarrolla erupción, deberá ser aislada y evaluarse como caso sospechoso, además se debe recolectar una muestra para análisis de laboratorio para detectar viruela símica
No debe donar sangre, células, tejidos, órganos, leche materna o semen mientras estén bajo vigilancia de síntomas
En caso de niños en edad preescolar se recomienda evitar que acudan a guarderías u otros entornos grupales
Brote
Un equipo del Centro de Control de Enfermedades investiga el virus de la viruela del mono en una aldea del norte del África Central.
Melina Mara (Getty)
¿Qué causa la viruela del mono?
La enfermedad está causada por un ortopoxvirus de la familia de la viruela, la primera enfermedad erradicada por el ser humano gracias a las vacunas. Se le llama del mono porque fue descubierta en estos animales en 1958, aunque también se puede encontrar en roedores. El primer caso en humanos se detectó en 1970, en República Democrática del Congo. Desde entonces, ha habido brotes en una decena de países africanos y se ha detectado mucho más raramente fuera del continente.
¿Cómo se contagia?
La principal vía es de animales salvajes a humanos. Y se cree que entre personas no es una enfermedad altamente contagiosa. Por lo que se sabe, es necesario contacto estrecho, ya que se transmite por fluidos corporales (mucosas, heridas, fluidos sexuales), aunque puede haber transmisión indirecta por contacto con objetos que tengan restos de estos fluidos, que incluyen gotas de saliva. La mayoría de los casos detectados por ahora en Europa se han producido en relaciones sexuales sin protección. No obstante, existe un estudio que apunta a la posibilidad de transmisión por aerosoles. Es un experimento de laboratorio y por el momento no deja de ser una hipótesis sin confirmar.
¿Por qué hay más casos entre hombres que han tenido sexo con hombres?
Por el momento, la gran mayoría de los casos detectados en España afectan a hombres que han tenido sexo con otros hombres en semanas recientes. Es un colectivo considerado vulnerable para otras enfermedades infecciosas, como el VIH. Pero el hecho de que se haya empezado a detectar entre ellos simplemente indica que es ahí donde se han localizado cadenas de contagios. Las formas de transmisión de la enfermedad hacen pensar a los expertos que las cadenas de contagios irán más allá de la vía sexual (que, por supuesto, puede afectar igualmente a las relaciones heterosexuales).
¿Cuáles son sus síntomas?
Los síntomas son similares a los de la viruela, pero algo más leves. Comienza con fiebre, dolores musculares y de cabeza. Entre uno y tres días después de la fiebre se forman erupciones cutáneas que, según explica el microbiólogo David Grandioso en Twitter, “por lo general afectan primero al rostro y luego se extienden al resto del cuerpo. Las zonas más afectadas son la cara, manos y pies. El número de lesiones varía desde unas pocas hasta varios miles, y afectan a las mucosas de la boca (70% de los casos), los genitales (30%), la conjuntiva palpebral (20%) y la córnea (globo ocular)”.
¿Dónde se ha detectado?
Desde el primer contagio a humanos, ha habido brotes en Camerún, Costa de Marfil, Gabón, Liberia, Nigeria, República Centroafricana, República del Congo, República Democrática del Congo, Sierra Leona y Sudán del Sur. Fuera de ahí, Estados Unidos ha detectado casos esporádicamente, el último antes de este brote, en 2021. Desde que Reino Unido alertó a principios de mes, este país ha notificado 20 casos confirmados, mientras que en España hay 30 confirmados y se investiga casi medio centenar; Portugal ha localizado al menos 20 casos. Y Canadá y Estados Unidos investigan más de una docena.
¿Cuál es su letalidad?
En la mayoría de las ocasiones la enfermedad no es grave y evoluciona favorablemente por sí misma. En África ha presentado tasas de letalidad de entre un 1% y un 22%, con mayor virulencia entre niños, pero es difícil exportar esas cifras, dadas las diferencias en los sistemas sanitarios y la capacidad de atención temprana. Según un artículo del catedrático en Microbiología Raúl Rivas González en The Conversation, los individuos infectados en Europa tienen la variante del virus procedente de África occidental, “que es leve en comparación la de África central”. Ninguno de los casos detectados en este brote ha terminado en fallecimiento.
¿Hay tratamiento?
No existen tratamientos específicos para esta enfermedad. Rivas González apunta a que antivirales como cidofovir y ST-246, así como inmunoglobulinas específicas, pueden ser utilizados para controlar los brotes.
¿Existe vacuna?
Tampoco hay una vacuna específica, pero la de la viruela —que dejó de administrarse en España en los años ochenta, cuando esta enfermedad dejó de ser una amenaza— parece otorgar una protección superior al 80%. El Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC) ha recomendado este jueves que las personas de alto riesgo que hayan estado en contacto estrecho con otras infectadas por la viruela del mono sean vacunadas.