CHILE.- Con un respaldo mayoritario, el proyecto de ley impulsado por el gobierno de Gabriel Boric para reducir la jornada laboral en Chile de 45 a 40 horas semanales fue aprobado por la Sala de la Cámara, marcando un hito en la legislación laboral del país.
El proyecto de ley que reduce la jornada laboral de 45 a 40 horas semanales en Chile, impulsado por el gobierno de Gabriel Boric, fue aprobado por la Sala de la Cámara con el respaldo de una amplia mayoría. Esta medida, considerada uno de los pilares de la actual administración, recibió enmiendas incorporadas en el Senado y superó su tercer y último trámite legislativo.
Desde su ingreso en 2017 por parlamentarios del Partido Comunista, entre ellos la actual secretaria general de gobierno, Camila Vallejo, el proyecto había estado en espera en el Senado hasta agosto de 2022, cuando el gobierno presentó indicaciones que permitieron reactivar su discusión.
La implementación de la nueva norma será gradual durante cinco años, con una reducción progresiva de la jornada laboral. En el primer año, se reducirá a 44 horas, en el tercer año a 42 horas, y finalmente a 40 horas en el quinto año.
Entre las disposiciones más relevantes se encuentra la posibilidad de establecer una jornada laboral de cuatro días trabajados por tres de descanso, conocida como 4×3. Además, se introducen medidas de flexibilidad, como la posibilidad de que la jornada ordinaria de 40 horas se cumpla en un promedio de hasta cuatro semanas, con un máximo de 45 horas semanales, siempre con acuerdo del sindicato en el caso de trabajadores sindicalizados.
El proyecto también contempla nuevos derechos para padres, madres y personas a cargo de menores de 12 años, como bandas de horario flexibles y la opción de compensar horas extraordinarias por días de feriado adicional, siempre en acuerdo con el empleado.
La noticia ha sido recibida con entusiasmo por trabajadores como Ana Camayo, una manicurista de 54 años, quien destacó que la ley beneficiará a muchas mujeres trabajadoras con hijos, permitiéndoles dedicar más tiempo a sus familias.
Con la aprobación de esta reforma, Chile se suma a Ecuador como los únicos países de América Latina en establecer una jornada laboral de 40 horas semanales. En otros países de la región, la jornada laboral es de 48 horas semanales, según datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).