Los ensayos realizados en fase 1 y 2 en alrededor de 1.077 voluntarios mostraron que la vacuna los llevó a producir anticuerpos y tuvo una reacción favorable en las "células T", dentro de los 14 días de la vacunación.
La vacuna contra el coronavirus desarrollada por la Universidad de Oxford parece segura para el sistema inmunitario y puede producir anticuerpos, de acuerdo a los resultados de los primeros ensayos publicados en la revista médica The Lancet, según informó este sábado la institución británica.
Esta reacción significa que los glóbulos blancos pueden atacar a las células infectadas con el virus SARS-CoV-2.
Los investigadores informaron además que la vacuna no provocó ninguna reacción inesperada, tuvo un perfil de seguridad similar al de las vacunas anteriores de este tipo y sólo causó pocos efectos secundarios que desaparecieron cuando se les suministró paracetamol a los pacientes.
Durante el estudio, los participantes que recibieron la vacuna tenían anticuerpos neutralizantes detectables, algo que los investigadores sugirieron como importantes para la protección contra el virus.
A su vez indicaron que estas respuestas fueron más fuertes después de una dosis de refuerzo, con el 100% de la sangre de los participantes teniendo actividad neutralizante contra el coronavirus.
Los investigadores indicaron que el siguiente paso en el estudio de la vacuna será confirmar que puede proteger eficazmente contra la infección del SARS-CoV-2.
"Vimos la respuesta inmune más fuerte en los 10 participantes que recibieron dos dosis de la vacuna, lo que indica que esta podría ser una buena estrategia para la vacunación", explicó Andrew Pollard, investigador jefe del Ensayo de Vacunas de la Universidad de Oxford.
La reconocida institución británica está trabajando también con la empresa biofarmacéutica mundial AstraZeneca con sede en el Reino Unido, en el desarrollo de la fabricación a gran escala y la posible distribución de la vacuna contra el coronavirus a nivel mundial.
En ese sentido, Mene Pangalos, vicepresidente Ejecutivo de Investigación y Desarrollo de Biofármacos de AstraZeneca, dijo que estos resultados de la fase 1 y 2, muestran que la vacuna fue capaz de generar una rápida respuesta de anticuerpos y células T contra el SARS-CoV-2.
"Aunque queda mucho por hacer, los datos actuales aumentan nuestra confianza en que la vacuna funcionará y nos permiten continuar con nuestros planes de fabricar la vacuna a escala para un acceso amplio y equitativo en todo el mundo", agregó.
Por su parte, Sarah Gilbert, investigadora de la Universidad de Oxford, resaltó que estos primeros resultados son prometedores ya que se puede producir a gran escala.
"Además de continuar probando nuestra vacuna en ensayos de fase 3, necesitamos aprender más sobre el virus; por ejemplo, todavía no sabemos qué tan fuerte es la respuesta inmune que debemos provocar para proteger eficazmente contra la infección por SARS-CoV-2", agregó.
La primera fase del ensayo comenzó en abril e incluyó al menos 1.000 voluntarios adultos, mientras que ahora se está probando en 10.000 voluntarios, incluidos personas mayores de más de 70 y niños de de 5 a 12 años.
"Los resultados de hoy son extremadamente alentadores, ya que nos acercan un paso más a la búsqueda de una vacuna exitosa para proteger a millones de personas en el Reino Unido y en todo el mundo", agregó también el Ministro de Comercio británico, Alok Sharma.
"Con el respaldo de una inversión gubernamental de 84 millones de libras esterlinas para el desarrollo y la fabricación de la vacuna, la agilidad y la rapidez con la que la Universidad de Oxford ha estado trabajando es sobresaliente. Estoy muy orgulloso de lo que han logrado hasta ahora", expresó el funcionario.
A su vez, Kate Bingham, presidenta del Grupo de Trabajo de Vacunas del Reino Unido subrayó que ese país tiene la suerte de contar con innovadores académicos tan destacados que trabajan junto con el equipo mundial altamente experimentado de AstraZeneca.
"Esta asociación está trabajando a una velocidad excepcional para demostrar la seguridad y la eficacia clínica de la vacuna en la protección de las personas contra la infección por coronavirus", señaló.
Producción de la vacuna contra el coronavirus
Mientras tanto, el Reino Unido anunció este sábado 25 de julio que ya ordenó 100 millones de dosis de la vacuna.
Mientras tanto, la Organización Mundial de la Salud ( OMS), calificó como “una buena noticia” los avances anunciados sobre esta vacuna "que ha dado resultados alentadores en un ensayo con 1.000 voluntarios", dijeron a través de su página web.
El director de emergencias de la Organización, Michael Ryan, consideró que son “resultados positivos”, pero recordó que son “estudios de fase 1” por lo que aún queda “un largo camino. Ahora hay que probarla en grupos más grandes de población", indicó.
"Una vez se logre que una vacuna sea efectiva, el reto será poderla fabricar a escala y que esté disponible para todo el mundo. La Organización Mundial de la Salud ha creado un acelerador de vacunas" afirmaron, y Ryan explicó que "habrá que dar una prioridad".
Ese mecanismo, como es actualmente, no podrá dar una vacuna a todos en el mundo. Tendremos que priorizar quién tiene qué vacuna al principio, según la que esté disponible. Y diseñar políticas y prioridades para el mejor uso de esas vacunas”, concluyó.
Por su parte, el director de la OMS, Tedros Adhanon Gebreyesus, insistió en que para que haya una distribución justa lo más importante es el compromiso político.
“Si no hay consenso para que esta vacuna sea un bien público global, los que no puedan permitírsela se quedarán sin ella", alertó Tedros.